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Lunes, 15 de abril de 2002
SALIDAS
Elaborando el plan de negocio (II)

COMUNIDAD DE MADRID. Continuamos con la serie de artículos sobre el plan de negocio en el que deberá asentarse nuestro proyecto empresarial. En esta ocasión incidimos en aspectos esenciales para la gestión, como el estudio de mercado, los recursos humanos y la forma jurídica.

La Comunidad de Madrid te ofrece su apoyo a través de la Asesoría para la Creación de Empresas y Autoempleo (Tel. 91 7201207), el Centro Regional de Información y Documentación Juvenil (Tel. 91 7201182) y la Escuela Joven de Iniciativas Empresariales (Tel. 91 5562044). Más información:

www.comadrid.es/inforjoven/

En la primera parte de este artículo, publicado la semana pasada, se enumeraron algunos de los elementos del plan de negocio (identificación de los promotores, resumen y descripción de la empresa, y descripcion del producto o servicio). A continuación se citan otros integrantes del plan de empresa.

v Estudio de mercado y diseño de la estrategia.

A través de este estudio se analizará el entorno de la empresa tanto a nivel macro (entorno genérico) como micro (sector industrial).

Con el estudio del sector industrial se determinarán las cinco variables que la definen: clientes, competidores, proveedores, productos de sustitución y rivalidad. Las relaciones entre estas cinco variables determinan el grado de rivalidad y de competencia del sector.

El conocimiento del mercado, tanto a un nivel macro (entorno genérico) como micro (sector industrial), es esencial para que la empresa diseñe su estrategia (como línea de acción en el mercado en base a unos objetivos).

v Plan de márketing.

Mediante la función y el correspondiente plan de márketing, la empresa deberá de definir sus cuatro variables (las denominadas cuatro pes): producto, precio, promoción y place (distribución). Con estas variables se definirá la actividad comercial de la empresa: su producto o servicio con sus prestaciones y características , su precio tipología, promociones, etcétera , promoción las formas de dar a conocer el producto o servicio y distribución (las vías distintas de canalizarlo hasta el cliente).

Esta función es de las más decisivas, ya que, mediante ella, la empresa se comunica con los clientes.

v Organización y recursos humanos.

La empresa es una organización formada por trabajadores que tienen como meta el acceder a unos objetivos comunes. Por ello, es esencial que toda empresa diseñe unos objetivos comunes conocidos y asumidos por sus miembros.

Otro elemento esencial organizativo es la cultura empresarial (aquellos valores y comportamientos comunes asumidos y aceptados por todos los miembros de una organización.

Los recursos humanos los podemos definir como el potencial humano de una organización. Este recurso es el más importante, ya que a través de él denota diferenciación, y es un soporte vital organizativo, junto a otros recursos como el tecnológico el financiero.

Se deberá, por tanto, definir con qué potencial humano cuenta la empresa, y establecer objetivos y un modelo de cultura empresarial u organizativa. El diseño de objetivos y de cultura empresarial es una preferencia o soporte organizativo, para la organización y sus miembros.

v Estudio económico y financiero.

Este estudio implica cuantificar todo el proyecto por cada uno de sus aspectos (personal, material, tecnológico, etc.). Mediante dicha cuantificación, obtendremos una valoración económica de nuestra empresa, en definitiva conocemos lo que cuesta nuestra empresa.

Una vez realizada la valoración económica de la empresa estimaremos la financiación necesaria, tanto por recursos propios como ajenos.

v Valoración del riesgo.

Una vez realizada la previsión económica-financiera, se evaluará la rentabilidad económica del proyecto y el posible riesgo debido al sistema de financiación establecido o con otras posibles causas de mercado.

Hay proyectos que pueden presentar una alta rentabilidad en un momento dado, pero que conllevan un alto riesgo. Pôr ejemplo, los productos de moda, que tiene un periodo de venta muy corto y mucha competencia, pero que a su vez pueden generar un nivel alto de beneficios por número de productos vendidos.

Por el contrario, nos podemos encontrar con otros proyectos que no tengan una alta rentabilidad pero que presenten un bajo o mínimo riesgo.

El riesgo es siempre un elemento que hay que valorar, ya que es imprescindible para determinar si se lleva a cabo o no el proyecto empresarial.

v Forma jurídica y trámites de la puesta en marcha.

Tendremos que optar por una determinada forma jurídica para nuestra empresa según a sus requisitos y necesidades (sociedad anónima, cooperativa, limitada). Además, tendremos que realizar una serie de trámites para la puesta en marcha de la empresa (jurídicas, Seguridad Social, Hacienda).

Información facilitada por el Servicio de Promoción y Empleo de la Comunidad de Madrid.



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