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 DIRECTORIO   Domingo 4 de mayo de 2003, número 394
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FAMILIA REAL / DIANA MARTINEZ-BORDIU
«Diddy» hasta la coronilla
LA SUPUESTA novia del heredero de la Corona, Don Felipe, se siente agobiada y traicionada por amigos
ANA MARIA ORTIZ

Lo que esta semana les decía Diana Martínez-Bordiú Aznar a sus compañeras de universidad podría traducirse, por suavizar un poco la cita real, como: «Estoy hasta la coronilla». Desde que hace poco más de un mes su nombre se relacionara con el del Príncipe (aunque fuera en grado de amistad) casi no ha tenido respiro.Lanzada su existencia a la palestra mediática, la búsqueda de su rostro, desconocido hasta entonces, se convirtió en objetivo prioritario del cuché: un fotógrafo se apostó en el Icade, la universidad madrileña donde estudia Traducción e Interpretación, otro a las puertas de su domicilio... Que escoltas de la Familia Real aparecieran por allí -la joven vive en una zona residencial que linda con los terrenos que rodean el palacio de La Zarzuela- y le pidieran al fotógrafo la documentación no hizo sino multiplicar la afluencia de flashes: ¿qué podía significar la presencia de escoltas reales sino preocupación por intentar mantenerla en el anonimato?


«Nos dijo», cuentan sus compañeras de Facultad, «que sólo son amigos, que el Príncipe tiene muchas amigas y que si no se apellidara como se apellida nadie repararía en ella. Estaba enfadada porque amigos suyos la habían traicionado, contestando a las preguntas de los periodistas y propagando el rumor».


La persecución no paró una vez hecha pública su imagen y su corta biografía, y Diddy, como la llaman sus allegados, ya ha protagonizado, al menos, cuatro portadas en las revistas de información rosa.Diana Martínez-Bordiú saliendo de su casa; acudiendo con sus amigas a un concierto de Shakira; visitando la Feria de Abril en Madrid; anulando su asistencia a una comida familiar con el Rey, que organizaba la infanta Pilar, ante la avalancha de fotógrafos que la esperaban... Pese a todo, cuentan sus compañeras, lo que más le ha irritado es que las cámaras la persiguieran hasta la República Dominicana. «Estaba muy agobiada. Imáginate que te vas de viaje de estudios con 20 amigas y todo el mundo pasándoselo bien menós tú que no puedes soltarte por la prensa». Cuando Diana regresó de Punta Cana, en el quiosco ya se había vendido su esbelta figura (mide 1,83) en biquini.


Similar seguimiento han sufrido una tras otra las jóvenes que se han relacionado con el Príncipe. La lista es larga. Sólo dese su ruptura con Eva Sannum, se cuentan cuatro: Flor María Varela Pérez-Jiménez, nieta del dictador venezolano Marcos Pérez-Jiménez; Mencía Roca de Togores, sevillana, hija de los condes de Luna; la actriz Gwyneth Paltrow, y Anna Jussil, una joven residente en Nueva York a la que el Príncipe habría conocido en la celebración del cumpleaños de Victoria de Suecia.


«El acoso mediático es inevitable tratándose del heredero de la corona, que no elige a una chica cualquiera sino a la que será la futura reina de España», dice el periodista y escritor Juan Balansó, quien no disimula que Diana Martínez-Bordiú no le disgusta como futura reina, aunque la joven podría tener algún pero. «No hay que olvidar que los hijos del Príncipe de Asturias llevarían exactamente los mismos apellidos que tiene hoy Luis Alfonso de Borbón...», dice Balansó.


Quienes ven en Diana Martínez-Bordiú a la candidata ideal apelan a su cultura, a su discreción y a sus exquisitos modales. Hija de José María Martínez-Bordiú y Rocío Aznar, habla inglés, francés y alemán y en unas semanas se licenciará en Traducción e Interpretación.Durante un año vivió en Bruselas, donde estudió con una beca Erasmus. Fue allí, cuentan sus amigas, donde mantuvo la que ha sido su relación más seria, con un eurodiputado del PP. Hasta estas Navidades estuvo saliendo con Juan Luis Calleja, conocido como Chiqui, relaciones públicas de la discoteca madrileña Fortuny.Es en este local donde supuestamente Diana y Felipe de Borbón se habrían conocido. Ambos comparten además la afición por el pádel.


Diddy, que cumplirá 22 años el próximo 26 de mayo, suele frecuentar las monterías que se realizan en las fincas familiares o en las de los Abelló, de cuyos hijos es muy amiga. Y es con ellos con quienes suele veranear en Africa. Para el terreno de la curiosidad, resaltar que, como Eva Sannum, alguna vez se ha subido a una pasarela.


Aventuran los expertos en la información del corazón que, agotado de momento el filón, Diana Martínez-Bordiú disfrutará de un respiro.«Ya ha salido bastante material sobre ella y con el desmentido de la Casa Real pasará a un segundo plano», explica Angela Portero, responsable de la agencia Korpa. Eso, claro, salvo que alguien logre fotografiar un encuentro suyo con el Príncipe.




 
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