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 DIRECTORIO   Domingo 3 de ocutubre de 2004, número 468
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HISTORIA/
Buscando a Colón en Cataluña
NOS DIJERON en la escuela que era genovés, pero parece que no es cierto. Los rastreadores del ADN van a iniciar una búsqueda entre los Colom catalanes y mallorquines
ILDEFONSO OLMEDO

Ni hijo de un humilde tejedor ni genovés. Posiblemente catalán, culto, descendiente de nobles acaudalados y durante su juventud corsario que luchó contra la misma monarquía que años después terminó financiando su viaje al Nuevo Mundo. Los resultados de la última gran investigación (antropológica, genética, lingüística...) sobre Cristóbal Colón, recogidos en el documental de próxima difusión Enigma Colón, sugieren el origen catalán del Almirante de la Mar Océana. El léxico de sus escritos y su firma (Colom y Almirant salen con frecuencia de su puño y letra) le delatarían.


Casi 500 años después de su muerte (1506, Valladolid), parece que se aproxima el momento de que un viejo sueño del propio del Almirant termine haciéndose realidad. Él lo escribió en latín (no se le conocen textos en italiano, y sí en castellano, con abundantes giros catalanes) en el Libro de los Privilegios, donde recopila las mercedes que recibiera de los Reyes Católicos: «De ti espero, señor, que la confusión no dure eternamente». Las respuestas a sus plegarias están escritas, con caligrafía química, en el cromosoma Y de los Colón, o Colom, o Colombo. Y ése ha sido el gran logro del genetista José Antonio Lorente. Gracias a la colaboración del laboratorio estadounidense (Orchid, en Dallas, Texas) que ha desarrollado nuevas técnicas para identificar por los genes a los muertos del 11-S, el profesor granadino dispone ya del ADN nuclear del hijo menor de Colón, Hernando, enterrado también en la Catedral de Sevilla. La clave está en el cromosoma Y, el único que los varones heredan por vía sólo paterna, como el apellido.

El retrato genético del hijo posibilita ahora, además de conocer parte importante del patrimonio hereditario del Descubridor para futuras comparaciones, enfrentar su perfil cromosómico con los de quienes llevan los apellidos Colom o Colombo, en Cataluña, Mallorca o Génova. Un buen muestreo de colones y la aplicación de las leyes de la probabilidad y la estadística harían que el dedo del Navegante, en vez de a América como hace ahora desde sus estatuas, termine señalando hacia la tierra donde en verdad nació.

Capitaneados por Lorente, director del laboratorio de identificación genética de la Universidad de Granada, el mismo equipo de investigadores que logró abrir las tumbas sevillanas de Colón, su hijo Hernando y su hermano cura Diego, se pone manos a la obra para localizar a los Colom actuales de la geografía catalana y balear. Después, tal vez, la labor proseguirá en Génova, donde la historia más aceptada sitúa el nacimiento de Cristóforo Colombo Fontanarrosa allá por 1451.

Anda ya entusiasmado con el reto Francesc Albardaner, director de investigación del centro de estudios colombinos de Barcelona y gran aportador a la tesis de un Colón Colom del documental Enigma Colón. Su órdago detectivesco no se quedará sólo en rastrear a los Colom vivos (hasta el mismísimo Jordi Puyol tiene el apellido en su genealogía). Albardaner dice tener ya prácticamente localizado, en la catedral de Tarragona, a otro ilustre Colom del siglo XV con quien comparar el ADN de la estirpe del Descubridor. Se trataría del canónigo de Tarragona y Tortosa Guillem Colom. Porque los parientes con los que Albardaner entronca la estirpe del Navegante, los Colom de Barcelona, tienen las tumbas perdidas desde que, con la desamortización de Mendizábal, el convento de Santa Catalina donde hallaron reposo dejara de ser lugar religioso. Hoy es un mercado.

En aquellos tiempos de carabelas e Inquisición no había más de 50 familias con ese apellido en los dominios de habla catalana.«Era un apellido nada frecuente...», explica Albardaner. También se dio en Valencia (al menos una rama familiar) y Mallorca (los tiene bien estudiados el investigador Onofre Vaquer Bennasar).«Yo propondría tomar muestras de ADN a Colom de Barcelona, Lérida y Mallorca», apunta Francesc Albardaner.

Las ramas familiares se han multiplicado tanto en estos cinco siglos que (genética dirá) el hombre sobre cuya gesta se cimentó el imperio español podría estar entroncado con, por ejemplo, el veterano independentista catalán Angel Colom, o con el periodista Ramón Colom, o con anónimos payeses que han heredado por los siglos de los siglos el viejo apellido. Así que si usted es varón, catalán o mallorquín, su primer apellido es Colom, quiere contribuir a resolver un enigma que dura desde 1492 y está dispuesto a abrir la boca para que le tomen una muestra de mucosa (saliva, suficiente para lograr ADN), reúne los requisitos para tener una cita con la Historia.

«Tanto menos conocido y cierto quiso que fuera su origen y su patria», escribió Hernando Colón a propósito de su progenitor.Amante de los libros (reunió una inmensa biblioteca privada), al menor de los hijos del Descubridor, además de su biógrafo, se atribuye también un texto con referencias al pasado corsario de su padre. Entonces apuntó ya una pista. Ahora es el cromosoma Y de su ADN el que abre una puerta para que entre la ciencia genética a resolver lo que los historiadores han sido incapaces: ¿quién era realmente el hombre que ensanchó el mundo?

La respuesta la pueden llevar en su cadenas de genes cientos de Colom catalanes y mallorquines que jamás creyeron tener relación alguna con el aventurero que embarcó a los Reyes Católicos en el descubrimiento de las Américas. «El cromosoma Y de Hernando, el hijo, y por consiguiente también de Cristóbal, es lo más importante de todos los resultados con ADN logrados por el profesor Lorente.Ese cromosoma Y de los Colón será en adelante la piedra de toque para saber, en nuestras investigaciones, si encontramos oro o latón», decía el viernes, durante la presentación del documental Enigma Colón, el experto colombino Frances Albardaner. Minutos después, Lorente anunciaba que los huesos de Cristóbal y Diego no terminaban de confesar sus secretos. La mala calidad de los restos dificulta sobre manera la extracción de material genético.

Los análisis practicados a los tres Colón (aún se está a la espera de que República Dominicana autorice el acceso a los huesos que ellos custodian y atribuyen también al Primer Almirante), han permitido conseguir, aunque no limpio del todo, parte del ADN mitocondrial de Cristóbal y su hermano Diego. Al tratarse de carga genética que se hereda exclusivamente por vía materna, se podría saber finalmente si la persona enterrada en la Catedral de Sevilla como Colón y la que estuvo sepultada en la Cartuja como su hermano Diego, compartían la misma madre. ¿Qué supondría esto? Pues confirmar la tesis española de que los restos verdaderos del Descubridor están junto al Guadalquivir y no en Santo Domingo.¿Y qué es lo que ha ocurrido? Comparados los ADN mitocondriales de ambos, coinciden en un 20%. El 80% restante está tan contaminado que es imposible cualquier comparación.


48 GRAMOS DE COLON


Lorente, optimista, aún confía en poder extraer ADN limpio de ambos. Sabe, también, que cada vez cuenta con menos hueso para el milagro. Ya lleva triturados (se mezclan con productos químicos para sacar de ellos el material genético) 48 gramos de Colón, 90 de Diego y 30 de Hernando (la mitad, 15 gramos, es la que viajó a EEUU e hizo posible el Eureka con el difícil cromosoma Y en huesos de cinco siglos de antigüedad).

El futuro de los trabajos de identificación genética en el proyecto Colón no sólo aboca a Lorente y su equipo hacia los Colom vivos de Cataluña, Mallorca y Génova. También hacia otros muertos, nuevas tumbas. Por ejemplo, hacia los restos del Príncipe de Viana y doña Leonor, abuela de éste. Las pesquisas para dar con sus osamentas están ya cerca de concluir con resultados, y el ADN podrá confirmar, o refutar para siempre, la teoría según la cual Colón era un hijo bastardo (nacido en Mallorca, donde el hermanastro de Fernando el Católico estuvo confinado) del Príncipe de Viana y una tal Margalida Colom. Pero ésa senda genética sólo se podrá transitar si antes se logra ADN bueno de Cristóbal Colón. Mientras tanto, es ese cromosoma Y de su hijo Hernando el que puede llevar al Descubrimiento. Su tripulación: los Colom de Cataluña y Mallorca. Los Colombo de Génova. Y el sueño de que al final, Lorente o alguien de su equipo grite aquello de «Tierra a la vista».



LAS NUEVAS CLAVES

LOS HUESOS DE LA CATEDRAL
Descarnamiento. Hallazgo del antropólogo forense Miguel Botella, que ha examinado los restos de Colón de la Catedral de Sevilla, es que fueron descarnados (una marca de cuchillo en la mandíbula revela que, ya muerto, se le separó la carne de la osamenta.¿Acaso para su traslado a Santo Domingo?). Un pequeño fragmento de cráneo ha servido para establecer que era un sujeto maduro (entre 50 y 70 años) de complexión grácil (menudo). No se pudo apreciar huella patológica alguna, pese a que el Descubridor, es conocido, padeció grave artrosis o gota.


LOS OTROS COLON
Espina bífida. Ha habido restos de parientes analizados. Los de Diego, el hermano menor de Colón, procedían de la Cartuja sevillana. Los de Hernando, el segundo hijo del Almirante, descansan en la Catedral. Ambos tienen soldada la quinta vértebra lumbar y una espina bífida incompleta. Diego, además, padeció una artrosis avanzada. El anquilosamiento es especialmente claro en su mano izquierda. Terminó sus días con, como poco, una mano inválida.Edad: entre 52-58 años. ¿Y Hernando? «Un sujeto de poco menos de 50 años, robusto y con ninguna marca patológica». Por el hábito de llevar siempre un palillo en la boca, presenta dos hendiduras en los incisivos anteriores del maxilar superior (ver foto).Él es el único de los Colón sobre cuyos restos no hay dudas.Algunas teorías dicen que los de su tío Diego de la Cartuja podrían ser realmente una parte de los del Almirante. Sabido es, también, que República Dominicana sostiene que el verdadero Colón está allí (los restos de la Catedral de Sevilla serían en realidad los de su hijo primogénito, de nombre Diego, que los españoles se trajeron por error).


«ENIGMA COLON»
El documental. Lo estrenará el próximo 12 de octubre Discovery Channel (producido por Tráfico de Ideas, Malvarrosa Media y Atlantic Productions). Reúne las conclusiones de los últimos estudios genéticos, antropológicos y lingüísticos sobre Colón, a partir de una propuesta originaria de Marcial Castro, historiador. La conclusión del documental: no era el hijo de un tejedor genovés, sino catalán de familia noble que quiso ocultar su origen. Sólo el ADN, a partir de ahora, lo podrá desenmascarar.


 
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