Finalmente la película elegida por la Academia para representar a España en los Oscar será 'Obaba'. Un filme de Montxo Armendáriz basado en el libro 'Obabakoak' de Bernardo Atxaga.
Un argumento así, con un montaje en final abierto, y basada en las narraciones históricas y fantásticas de los personajes sobre el pueblo y sus gentes, no parece que pueda tener relevancia en el mundillo de Hollywood. A todos nos gustaría pensar que sí, pero nos inclinamos a creer que no.
La adaptación de Armendáriz gustó al autor, que participó en la presentación de la película. Sin embargo, no refleja ni la mitad de los detalles que se pueden percibir en la obra de Atxaga. Leída en castellano parece un cuento lleno de paisajes y fantasía cuyos personajes van conformando una historia poética muy atractiva del pueblo de Obaba.Leída en vasco, su lengua original, estos rasgos se ven aumentados.
Adaptar un relato como el de 'Obaba' debe de resultar muy complicado, de manera que el director navarro ha arriesgado una vez más y eso debe contar a su favor. El resultado es una película entretenida pero que no deja demasiada huella en el espectador.
Los personajes son fundamentales porque construyen una historia coral a través de sus vivencias. Estas son filtradas por la protagonista, una estudiante que quiere hacer un reportaje sobre la mina del pueblo y que actúa como narradora de lo que los vecinos le cuentan.
Lo mejor, la fotografía del eibarrés Javier Aguirresarobe, que nunca decepciona. Uno podría ir a ver la película sólo para disfrutar de sus imágenes, su luz y su visión física de la novela.
Lo peor es que las posibilidades de 'Obaba' en América son muy limitadas, no responde al tipo de película que suele ser galardonada en la categoría de mejor película en lengua no inglesa.