¿UTOPÍA O POSIBILIDAD?
Los intereses del Primer y Tercer Mundo coinciden ecológicamente
J. MARTÍN GIL
El Primer Mundo también sufre las consecuencias de no apoyar un desarrollo sostenible. (Foto: Justy García) |
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¿Es utópico alcanzar un desarrollo mundial más humano y sostenible y vivir con menos estrés? Aunque hoy por hoy lo sea, la juventud sigue luchando por alcanzar esa utopía. Los actuales modelos de capitalismo neoliberal no nos sirven, ya que están incrementando la pobreza en el mundo y el estrés en nuestra sociedad y, como consecuencia, se está perdiendo calidad de vida.
No sólo la especie humana acumula estrés. En las explotaciones ganaderas y avícolas los animales viven en un ciclo cerrado (aunque eso nos proteja de la gripe aviar) y hasta las plantas sufren estrés a cuenta del incremento de la polución. Hoy algunos buscan volver al medio rural o bien, como Goytisolo, vivir en un medio urbano con ambiente multiétnico (Barcelona, París, Nueva York) disfrutando de ese "Patrimonio oral de la Humanidad" (como la plaza de Marrakech). Hoy también, algunas ciudades buscan eliminar el estrés, haciendo los núcleos urbanos peatonales y potenciando los paseos y las plazas y fomentando el diálogo y los juglares. Mejorar la Calidad de Vida en el Primer Mundo es sentirse solidario e integrar progresivamente la cultura del Tercer Mundo en el Primero. El Nuevo Modelo de Desarrollo promulgado en las Cumbres de la Tierra trata de potenciar el Desarrollo Sostenible a través de las Agendas 21: respetando al máximo nuestros recursos y los del Tercer Mundo, controlando y minimizando la contaminación y ordenando el territorio, y la emigración, invirtiendo los gobiernos en el desarrollo de las economías y políticas del Tercer Mundo, potenciando sus productos y sus recursos y restableciendo el equilibrio económico. Renunciando en parte a nuestro patrimonio o a seguir creciendo, mejorará nuestra calidad de vida y aumentará la cultura y la educación en el Mundo. Esto hoy es una utopía, pero puede dejar de serlo.
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