El coche fue descubierto en 1993 en Chile y sus propietarios lo reformaron totalmente, indicaron los responsables de la venta, quienes señalaron que este tipo de modelos pueden ser adquiridos por unos 5.000 euros.
El modelo Sáhara, equipado con dos motores, fue fabricado por Citroën en 1959, con el objetivo de enviarlo a los campos petrolíferos del Sáhara.
El fabricante construyó 900 modelos "Sáhara", de los cuales se calcula que quedan unos 250. En su día, el "Sáhara" fue objeto de bromas en Francia, ya que, al tener un segundo motor en el maletero, pagaba un impuesto similar al de los coches de cinco caballos, por lo que la población reprochaba al Gobierno no saber sumar.