[Pagina de inicio]
 Miércoles, 22 de junio de 2005   Actualizado a las  12:25 h
* SECCIONES
Portada
Multimedia
Especiales
Medicina
Deporte
Biociencia
Salud personal
Neurología y Psiquiatría
Mujer
Pediatría
Industria y sanidad
* CÁNCER
* SIDA Y   HEPATITIS
* DOLOR
Archivo
Especiales
Gráficos
Encuentros
Dudas y Preguntas
* TABAQUISMO
* SUPLEMENTO
Suplemento
Archivo
* TEMAS
Corazón
Dieta
Enfermedades
Foros
Biblioteca
* elmundo.es
Portada
España
Internacional
Economía
Sociedad
Comunicación
Solidaridad
Cultura
Ciencia /
Ecología
Tecnología
Madrid24h
Obituarios
DEPORTES
MOTOR
Metrópoli
Especiales
Encuentros
URGENTE

 DOLOR
 

FACTORES DE RIESGO
El tipo de trabajo explica la relación entre nivel educativo y lumbalgia

ISABEL ESPIÑO

    A D E M Á S ...
>>> informaciones anteriores
>> NOTICIAS RELACIONADAS

VIENA.- Un estudio presentado en el último congreso de reumatología ha desvelado por qué los individuos con menor nivel educativo tienen más dolencias lumbares. El tipo de trabajos que desempeñan tiene la culpa. De todos modos, los expertos allí presentes recordaron que los genes también juegan un importante papel en el problema.

Desde hace unos años, los científicos saben que las personas con un menor nivel educativo de una persona está asociado con sus probabilidades de sufrir dolor de espalda. Lo que ya no estaba tan claro era el motivo de esta relación. Podía ser por el tipo de trabajos que desempeñan los individuos con menos formación o bien por hábitos nocivos (sedentarismo, tabaquismo...) más frecuentes en las clases más bajas.

Un equipo de investigadores noruegos decidió "averiguar hasta qué punto esto estaá relacionado con las exigencias del trabajo o con el estilo de vida individual", explicó Kare Birger Hagen, del Centro Nacional para Rehabilitación en Reumatología de Oslo (Noruega), durante el Congreso Europeo Anual de Reumatología, celebrado del 8 al 11 de junio en Viena (Austria).

Para ello, Hagen y su equipo han seguido durante siete años a casi 35.000 hombres y mujeres trabajadores. Durante este periodo, 715 participantes recibieron la incapacidad debido a sus problemas de espalda.

Tras valorar las condiciones laborales (estrés, capacidad de planear el propio trabajo, exigencias físicas, satisfación laboral...) e individuales de estos individuos, constaron que las características de la ocupación eran el factor que más influía en la relación educación/dolor de espalda.

En concreto, el factor que más influía en el dolor de espalda era tener un trabajo con importantes exigencias físicas. De hecho, este factor reducía entre un 50% y un 60% el efecto protector del nivel educativo sobre el riego de dolencias lumbares.

"Las condiciones y la clase laboral contribuyen mayormente a explicar las diferencias educativas [en el riesgo de incapacidad por patología lumbar] mientras que el estilo de vida aporta poco a estas dievrgencias", concluyó Hagen en la reunión científica.

También un trastorno genético

Pero además de los factores laborales, lo cierto es que el dolor de espalda tiene un fuerte componente genético. "Hasta hace poco, se creía que los factores laborales y mediambientales eran los que tenían mayor influencia [sobre la dolencia lumbar]. Sin embargo, los estudios en gemelos han mostrado con claridad que el factor más importante está en nuestros genes", comentó Tim Spector, investigador de la Unidad de Investigación con Gemelos del Hospital Saint Thomas de Londres (Reino Unido), durante la reunión científica.

En 1999 este especialista realizó un estudio com más de 300 gemelos donde constataba que la heredabilidad de un problema discal era de hasta un 74%. Del 64% cuando se trataba de los casos más gaves."Los factores genéticos suponen más del 50% de la variación" en las posibilidades de sufrir dolor lumbar, resume.

"Sabemos que en parte es algo genético. Ahora hay que ver qué genes están implicados", comentó Spector. Y en ello anda este especialista.

Los 'candidatos' al título de 'el gen del dolor de espalda" son múltiples. De hecho, el británico calcula que "entre 50 y 100 genes podrían estar relacionados" con el trastorno. Se trata de fragmentos de ADN relacionados con los umbrales de dolor, el miedo y la ansiedad, la anatomía y el crecimiento y la artrosis lumbar y de rodilla.

Spector es uno de los investigadores del Chingford Study, un gran seguimiento en el que participan más de 1.000 británicas desde hace 11 años. "Recientemente, hemos estudiado 25 polimorfismos [variaciones genéticas] cantidatos implicados en la artrosis de rodilla en una muestra de 720 mujeres de las que teníamos los datos sobre su evolución espinal durante 10 años", comenta.

Su investigación ha constatado que las variaciones genéticas en los genes MMP3, TIMP1 y COX2, que codifican moléculas relacionadas con los procesos inflamatorios, estaban asociadas con una degeneración lumbar. "Estos avances genéticos ofrecen esperanza de posibles nuevas dianas terapéuticas en esta enfermedad poco estudiada", concluye.

   
<<< volver
imprimir
enviar

BÚSQUEDAS
* DICCIONARIO

Sobre elmundo.es salud
correo: elmundosalud@elmundo.es
Publicidad en elmundo.es salud
© Mundinteractivos, S.A. | Política de privacidad