"Una significativa proporción de pacientes con cefalea tensional [ocasionada por tensión muscular en la cara, cuello y hombros] se beneficia de la acupuntura. La magnitud de este efecto parece ser comparable a la de los tratamientos aceptados para este dolor de cabeza", concluyen los autores, que han estudiado durante 12 semanas a 270 personas con este trastorno.
Aquellos que recibían sesiones de acupuntura (12 sesiones durante ocho semanas) el número de días con cefalea descendía una media de siete días, mientras que entre los que no recibían ninguna terapia sólo se se reducía un día y medio. Estos efectos comenzaban a ser patentes a partir de la cuarta semana y se mantenían unas 12 semanas. En concreto, se realizaron 12 sesiones de acupuntura durante ocho semanas. La terapia china consiste en colocar agujas en determinados puntos dispuestos en una serie de meridianos, divisiones que se corresponden con determinado sistema orgánico.
Curiosamente, el estudio ha desvelado que la acupuntura clásica resultaba de una eficacia similar a una falsa acupuntura (agujas superficiales colocadas en puntos que no se correspondían con puntos de acupuntura). En estos últimos el número de días con cefaleas también disminuía una media de siete días.
Asimismo, la proporción de voluntarios que respondían al tratamiento (es decir, que experimentaron una reducción significativa de sus cefaleas) era semejante en ambos colectivos: 46% de los que recibieron acupuntura clásica y 35% de los que recibieron la mínima acupuntura. Entre los que simplemente se sometieron a los cuidados habituales, sólo el 4% mejoró considerablemente.
¿Por qué funciona la acupuntura placebo?
Recientemente, este equipo de investigadores registraba unos resultados similares en un estudio sobre el tratamiento preventivo de la migraña: la acupuntura reducía el número de crisis, pero también lo conseguía una acupuntura falsa.
Estos especialistas creen que estos hallazgos "indican que la localización de los puntos y otros aspectos considerados relevantes para la acupuntura tradicional china no suponen una gran diferencia".
Los efectos de la acupuntura (incluso cuando se trata de agujas colocadas superficialmente) podrían deberse a "una alteración local en la circulación así como un amplio rango de respuestas neurofisiológicas y neuroquímicas, como la liberación de neurotransmisores o la activación de sistemas antinoniceptivos [analgésicos]", reza el estudio, avazado en la edición 'on line' del 'British Medical Journal'.
Asimismo, los autores no descartan que la terapia china tenga "efectos placebo especialmente potentes". "Las intervenciones médicas complejas o los aparatos médicos tienen unos efectos placebo mayores que los fármacos. El tratamiento de acupuntura tiene características que se consideran relevanets en el contexto de los efectos placebo. Tiene un entorno 'exótico' que hace hincapié en 'el individuo como un todo', está asociado con contactos frecuentes entre el paciente y el terapeuta e incluye el repetitivo 'ritual' de las agujas", agregan.