No lo viví directamente
pero casi. Yo estaba en París pasando unos días
y tenía que ir a Palma de Mallorca a casa de mi hermana.
No tenía vuelo directo y tenía que ir vía
Barcelona. Al llegar al aeropuerto, me dieron un mensaje
de mi hermana diciendo que bajo ningún concepto regresara
a España. Regresé al hotel y me puse a vivir
las noticas, que eran muy intranquilas porque se vivía
todo con mucha angustia, sobre todo pensando en la familia
y en los amigos y en el peligro que corría la democracia
y el riesgo total de una dictadura, que es una de las cosas
que más me aterran y la involución que hubiera
supuesto para el país. Lo viví muy mal. |