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EL ÚLTIMO
PADRINO
por Sonia Aparicio
Un cáncer de garganta acabó con John Gotti, uno de los
principales 'capos' de Nueva York de los años 80, que pasó
los últimos diez años de su vida en una cárcel
de máxima seguridad. Gotti, uno de los 13 hijos de una familia
de emigrantes napolitanos, comenzó su 'carrera delictiva' en
plena adolescencia, hasta convertirse en un gángster cruel
y malvado, cuya elegancia le valió el sobrenombre de 'El apuesto
Don'. Entre 1985 y 1982, lideró una de las familias mafiosas
más importante de Nueva York: los Gambino. Su juicio, más
sonado que el de Al Capone, terminó con sentencia de cadena
perpetua. Si polémica fue su vida, también lo fue su
muerte: la Iglesia Católica se negó a ofrecer un funeral
público a un criminal tan famoso. (FOTO: AP) |
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