Hombre y mujer en un solo cuerpo

Hombre y mujer en un solo cuerpo

Jacqueline Foroni vestida de mujer en un grabado de principios del siglo XIX.


De la exhibición en circos al secreto mejor guardado

Dicen que el choque es brutal. Sólo los mejor atendidos psicológicamente logran encajar el golpe de tener unos genitales ambiguos. Junto a las consecuencias que afectan a la personalidad del sujeto, están las leyes. El cambio comienza a ser apreciado a temprana edad y los padres deben tomar la decisión. Las disposiciones legales obligan a designar un sexo al recién nacido e inscribirlo en el Registro Civil. Sólo se deberá dar ese paso una vez que se haya realizado un diagnóstico certero. Equivocarse en este momento, además de traumas, supondrá engorrosos trámites para registrar al sujeto con otro sexo al asignado al principio.

Según el pediatra Manuel Cruz Hernández, el sexo cromosómico y el sexo gonadal tienen una importancia secundaria sobre el papel sexual futuro; en cambio, la forma de educar al paciente, en sentido masculino o femenino, tiene una repercusión trascendental. Esta tarea, en la que los padres tienen una responsabilidad decisiva, es una de las claves para un desarrollo sin traumas.

Éstos son algunos de los casos de hermafroditismo más famosos: María Magdalena Lefort. Vivió en París en el siglo XIX. Fue uno de los primeros hermafroditas de los que existen testimonios gráficos, recogidos en libros médicos, y así hay grabados de María Magdalena a los 19 y a los 65 años. Jacqueline Foroni. Nació a finales del siglo XVIII, e igual que Lefort, su imagen quedó inmortalizada en los tratados de medicina. Francis Benton. A finales del pasado siglo, este sujeto era exhibido por los circos americanos como el fenómeno del siglo, capaz de mantener relaciones sexuales con unos y otros. La exageración comercial escondía un ejemplo de hermafroditismo. Encarnación Ruipérez. Uno de los casos más humillantes de la gris España. Detenido/a con 20 años por un agente, su verdadero delito figura en la ficha policial: sus dobles genitales y se le registra como: "Caso típico de hermafrodita". Carlo. Un caso que trajo en jaque a toda la comunidad científica hace unos años. Algunos pensaron que Carlo, un filipino que decía estar en estado de gestación, era el primer caso de hermafrodita embarazado. La noticia fue un bulo. Carlo sólo era un pseudohermafrodita. Pedro Giménez. A sus 32 años, este barcelonés mostró sus genitales en la revista Interviú. Hoy, con 50 años, se desconoce su paradero. "Tenía que ir al retrete de las niñas, pero nadie se mofaba o se reía de mí".



EN EL ANONIMATO
Testículos, genitales externos femeninos normales, vello sexual escaso, desarrollo mamario... Todo en uno. El síndrome de Morris no es más que una de las múltiples variedades de intersexualidad. En Grecia y Roma eran asesinados al nacer o al descubrirse su condición. Hoy no se llega a tanto, pero se aplica la más sutil de las formas de ejecución: el rechazo y el escarnio social.

Los sujetos que padecen algún tipo de pseudohermafroditismo suelen permanecer en el anonimato precisamente por este motivo. En España se han conocido algunos casos. "Existen ejemplos de personas con sexo ambiguo, pero no están reconocidos ni diagnosticados por dos motivos: en primer lugar porque estamos hablando de sexo, y en segundo lugar porque estamos hablando de un tema tabú: el hermafroditismo", dice la doctora María Teresa Solé.

Reportaje



Las desventuras del niño lama / Chiapas / Entrevista: Massiel / Feliz 800 cumpleaños Giralda / Martina Hingis / Hombre y mujer en un solo cuerpo / Bette Davis / Mesa y Mantel / Restaurante / Vino / Ruta / Hotel / Conéctate / Recetas / Horóscopo / Adivinación / Ecología: un poco de agua basta / Si yo fuera presidente / Una semana verde / La mirada de Francisco Umbral / Almanaque / Gentes / Cuaderno rosa de Ana Rosa Quintana / El tablón /

Fauna: Tejón / Flora: Jara pringosa

TOP LA REVISTA VOLVER