Reportaje

"No somos bichos raros, sencillamente hemos elegido un camino y queremos que se nos respete". Éstas son las palabras de Yamila, una joven madrileña que hace cinco años decidió aceptar el Islam como doctrina.

Son muchas las españolas que han decidido hacerse musulmanas. Inmediatamente viene a la mente un tópico: "Se han enamorado de un árabe que las ha hechizado, que tengan cuidado, puede ser peligroso".

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Amparo, al volante de su automóvil, recorre las calles de Valencia.

Pero las mujeres que pueblan este reportaje, como otras muchas, han llegado al Islam guiadas por inquietudes espirituales, buscando ese algo que llene sus vidas, cuyo nombre no es Alí ni Omar, sino Alá, el dios de los musulmanes.

El mensaje de su doctrina fue revelado por Mahoma hace 14 siglos y preservado por el libro del Corán, cuya primera enseñanza es la Unidad de Dios; es decir, el creador del mundo es uno y Mahoma su emisario y sirviente. Al menos, eso piensan más de 800 millones de personas, 400.000 de ellas en España, en más de 50 países. Siete españolas musulmanas cuentan el porqué.


JADICHA CANDELA

Reportaje

Jadicha Candela es letrada de dos comisiones del Congreso.

EDAD: 48 años.

LUGAR DE NACIMIENTO/RESIDENCIA: Murcia/Madrid.

ESTADO CIVIL: Casada con un español no musulmán.

HIJOS: Yamila, de 27 años, abogada y también musulmana.

PROFESIÓN: Licenciada en Derecho, letrada de los Colegios de Abogados de Murcia, Granada y Madrid, ha realizado un master en Derecho económico de los Países Árabes y, desde hace años, es letrada de la Comisión de Infraestructuras y Mixta para la Igualdad de Oportunidades del Congreso de los Diputados por el PSOE. Fundó la Comunidad Islámica An-Nissa.

ANTICLERICAL: "Entre muchos musulmanes ha causado revuelo que mi marido no lo sea. Mi camino es el recto y quizás muchos no lo entiendan. Que no haya un clero entre el creyente y Dios es fundamental. He sufrido mucho con la clerecía y la beatería que había en España, creo que nos han hecho mucho daño. Antes de ser musulmana había militado en política para cambiar las cosas. Si hubiéramos tenido libertad religiosa sería muy diferente; habría otro modelo de sociedad. Creo que la culpa la tienen los curas. Soy anticlerical radical, pero con todas las religiones".

AN-NISSA: "Es un grupo de mujeres españolas de mi generación que ha aceptado el Islam. La mayoría tenía una militancia muy fuerte en la izquierda y a partir de ahí buscaban algo espiritual que les llenase. Creamos esta asociación, que engloba la parte religiosa -ámbito que me parece más duro y que está sin desarrollar-, para poder participar en los acuerdos de cooperación. Carece de aparato, es muy asamblearia, nadie quiere ser jefe y no hay cuotas. La rama cultural la lleva el grupo Baraka".

ESPAÑOLES: "Los que nos hemos hecho musulmanes somos, en general, gente muy marginal, profesionales liberales que trabajan por su cuenta y muy rojos, con una gran oposición al sistema. Encontramos algo parecido al anarquismo sin anarquía, aunque la evolución no ha sido la misma en los países islámicos más tradicionales".

CONOCIMIENTO: "Me interesa la Historia, y vi que había lagunas. Empecé a conocer el Islam con un importante maestro místico. Fui a América (1978) y me metí más. En Granada inicié de verdad mi camino".

ACEPTACIÓN: "Descubrí un Islam en el que tú debes elaborarte y lo asumí en 1979. Lo tomé como algo mío, un compromiso personal, pero rechazando imposiciones. He visitado todos los países musulmanes y tres veces la Meca".

MATRIMONIO: "Intento que mi compañero lo descubra por sí mismo. Él dice que es musulmán de espíritu".

SOCIEDAD ESPAÑOLA: "La opinión que se tiene se basa en la propaganda que hace 1.500 años hizo la Iglesia. Cuando alguien investiga lo que decía la prensa antes de la revolución iraní alucina. Antes, los musulmanes eran nuestros amigos y luego todo cambió. Igual que Franco: eran sus amigos para limpiarle los zapatos, la guardia mora para matar a los rojos...; eran esclavos que no le replicaban y por eso los reclutó".

REACCIÓN FAMILIAR: "Fatal. Mi decisión resultaba inexplicable. No comprendían que una persona de clase media sin ningún antecedente se hiciera musulmana. Después tuve unos problemas tremendos porque mi padre es católico practicante y no ha habido la menor posibilidad de que aceptara la diferencia. Mis hermanos eligieron el camino de ser laicos".

LIBRES: "Queremos una libertad a ultranza, y el Islam nos la da. Estábamos huyendo de una dictadura religiosa y hemos logrado no estar en manos de los sacerdotes. Deseamos esa oportunidad histórica que nos fue arrebatada durante años. Hubo un genocidio de moriscos y ahora queremos renacer. Si lo logramos, seremos un grupo de españoles que está intentado vivir su Islam histórico. Si no, seremos una sucursal de los de Arabia Saudí, aunque lucharemos para que no sea así. Jamás voy a aceptar la clerecía ni la beatería islámica".

VELO: "No lo llevo. No es una obligación, sino una opción personal. Cuando estuve en Irán y debía ponérmelo, me di cuenta de que muchos quieren ver preceptos que no existen. El arma fundamental contra la mujer es la ignorancia, no el velo. El derecho a la propia imagen es esencial: déjame que decida yo si el velo es una obligación".

TÓPICOS FALSOS: "Me indigna que tachen al Islam de intolerante cuando siempre ha sido la religión más tolerante. El fundamentalismo es algo de la cultura occidental, porque el Islam siempre ha protegido a todas las iglesias; es duro. Lo triste es que, a veces, la verdad no importa, sólo lo que la gente piensa, lo que se difunde. Ahí la prensa tiene una gran misión clarificadora".

MACHISMO: "Es lo que más me duele, porque el profeta predicaba la defensa a ultranza de la mujer. Él dijo que había tres cosas que le gustaban en este mundo; la primera, las mujeres en todos los sentidos. No entiendo cómo pueden seguirle los machistas y variar así su mensaje. Sé de muchas españolas casadas con musulmanes que han aceptado el Islam, pero no han investigado, se han tragado lo que les decían. Si la mujer carece de nivel cultural y el hombre tiene complejo de inferioridad, éste se amparará en la religión para atacarla".

DIVORCIO: "Yo lo he hecho, y es una salvación si lo que tienes es un infierno, el remedio a una desgracia. En el divorcio musulmán las dos partes tienen idénticas opciones. Nuestra lucha fue que se aceptara la posibilidad de que la mujer se divorciara sin causa, que dijera, por ejemplo: `Este hombre no es apto para cumplir sus obligaciones porque no me gusta sexualmente'".

ADULTERIO: "La mujer tiene total y plena libertad sexual. Ahora bien, existe otra cosa que es la institución del matrimonio. Es de orden público que para mantener relaciones sexuales se debe estar casada, pero para inculparla de adulterio son necesarios cuatro testigos. Si comete el adulterio en privado está libre de castigo. Si lo hace públicamente y va en contra del orden establecido, se la considera adúltera o prostituta, que se denominan con la misma palabra".

HOMOSEXUALIDAD: "Según la doctrina, no está permitido provocar al ámbito establecido -que es heterosexual- con relaciones homosexuales públicas. Pero en tu vida privada puedes hacer lo que quieras".

"EL ISLAM ES PELIGROSO": "Porque ha sustituido al rojo como enemigo. El Islam no tiene jefes, puede reunir a miles de personas en un punto para orar y dispersarse después. Esta falta de jerarquía es al tiempo su fuerza y su impedimento".

SER MUSULMANA: "Te cambia la vida. Primero pasas a ser parte de una minoría, con eso ya tienes bastante. Luego, te conviertes en heredero de un genocidio. Si nos dejaran, podríamos crecer libremente".


SALAMA

Reportaje

Salama se divorció de un árabe y se casó con un musulmán americano.

EDAD: 45 años.

LUGAR DE NACIMIENTO/RESIDENCIA: Cartagena/Órgiva (Granada).

ESTADO CIVIL: Casada con un americano musulmán. Anteriormente lo estuvo durante dos años con un árabe.

HIJOS: Cuatro, de su segundo matrimonio.

PROFESIÓN: Ama de casa.

ENCUENTRO CON EL ISLAM: "Provenía de una familia católica y estudié con las monjas. Pero llegó un momento en que dudé de los dogmas de la Iglesia Católica. Acabé Peritaje Mercantil y estuve tres años trabajando en una empresa, pero no estaba satisfecha ni con mi corazón ni con lo que me rodeaba. Muchos de mis amigos bebían, estaban metidos en drogas y eso no me iba. Yo buscaba algo más espiritual. Entonces, como soy aventurera, conocí a unos árabes que trabajaban en un barco y decidí irme con ellos. Me dieron empleo como camarera y me marché; estábamos en 1977. Allí conocí a un chico egipcio, jefe de cocina del barco, y nos casamos enseguida (1978). Fue todo muy loco, la verdad, aunque sabíamos algo uno del otro porque su madre era empleada de mi padre".

VIVIR ENTRE ÁRABES: "Viajamos a Turquía, Siria, Jordania e Irak, donde nos quedamos a vivir. Comprobé que los musulmanes tenían muy buen corazón. Empecé a interesarme más. Un imán me contó que Jesucristo era un profeta, y entendí que el Islam era la continuación del cristianismo. Éste está atascado y el Islam es el paso siguiente".

MUJERES EN IRAK: "La imagen que se tiene no es la real. Conviví con varias familias y me di cuenta de que había muchos tópicos falsos. En el Islam tenemos una posición muy alta, igual a la de los hombres, con derechos y obligaciones. Lo que ocurre es que, a veces, la teoría no coincide con la práctica, como sucede en el cristianismo. Hay hombres que quieren asumir como islámicas tradiciones que no lo son. En Irak había mucha ignorancia, mucho desfase".

FAMILIA: "Cuando acepté el Islam, con 22 años, pensaron, lógico, que era otra locura mía, que era otra aventura pasajera, porque me había enamorado. Pero después, cuando me divorcié y seguí enganchada, comprendieron que iba en serio".

VELO: "Sí, lo uso. Por ejemplo, cuando vas a hacerte el carnet de identidad y llevas la fotografía con el pañuelo miran tu nombre y lugar de nacimiento y les parece raro. Yo digo que es legal, que puedo entregar esa foto, pero les resulta raro".

HIJOS: "Somos varias familias musulmanas con niños en el mismo colegio público y por eso es más fácil que acepten determinados aspectos de la educación musulmana. Hay cuestiones donde aún es duro, sobre todo en los temas históricos".

VECINOS: "Nos han aceptado fenomenalmente, saben que somos tranquilos, que no bebemos ni tomamos drogas, admiran que seamos tan sanos. En España estamos tranquilos, la ley no nos persigue".

GASTRONOMÍA: "Cocino igual que cualquier ama de casa, lo único que en lugar de cerdo utilizo ternera u otro tipo de carne. No nos perdemos nada bueno".

"MUJERES SIN EDUCACIÓN": "Es verdad. En algunos países ciertos hombres no quieren que sepamos leer o escribir. Pero eso es pecado, en el Islam la sabiduría debe ser igual para ambos sexos".

DIVORCIO: "Siempre que hay una razón de peso, no eres bien tratada o tu marido no cumple puedes pedir el divorcio. Pero antes, debes intentar poner un remedio, hay un intermediario que trata de que la pareja siga unida. Si no hay entendimiento y el otro sigue empeñado en sus tonterías no hay más remedio que el divorcio".

ADULTERIO: (sonríe). "Cuando ocurre es por algo. Si hay amor entre la pareja y se lo pasa bien en la cama no sucede nada por muchas tentaciones que haya. En el sexo hay normas de comportamiento, unas cosas son permitidas y otras no. Lógicamente, hay que respetarlas, seguirlas y disfrutarlas, que es lo importante. Si se produce adulterio hay una pena. Son necesarias cuatro personas -nada de vídeos o fotos- que les hayan visto practicando el sexo. Es una ley curiosa porque es delicado. He vivido en muchos países, y esta ley no se cumple, la mujer siempre sale perdiendo. Se han visto muchos casos de mujeres apedreadas o ejecutadas. Pero, ¿y si el adúltero es él? No pasa nada. En muchos casos resulta ser fruto de sospechas o chismes".

"NO SIN MI HIJA". "Cuando salió el famoso libro estaba en Estados Unidos y leí en una revista musulmana un reportaje sobre esta mujer. No era todo como lo cuenta la película. Tenía un problema con la bebida, se había divorciado dos veces. Se ha buscado lo más morboso, pero en ocasiones no se cuenta la historia entera. Es cierto que ocurre, que a veces el marido secuestra a los hijos, pero la mujer puede acudir a la justicia. En el Islam la ley es justa y está a favor de la mujer. Lo que falla en muchos casos es la ley práctica ; es una desgracia".

ABLACIÓN: "Sucede, pero no tiene que ver con el Islam. Mi ex marido, que tenía cosas muy maniáticas, estaba de acuerdo. Decía que era por costumbre y por celos, por el poderío del macho, pero eso no es islámico. Las leyes del Islam son perfectas, pero muchas veces el hombre las ha cambiado".

¿QUÉ HA HALLADO EN EL ISLAM?: "El camino al paraíso. Es un equilibrio físico, mental, espiritual y de corazón completísimo. Si después de casi 23 años sigo y no lo suelto, será por algo".


AMPARO SÁNCHEZ

Reportaje

EDAD: 47 años.

LUGAR DE NACIMIENTO/RESIDENCIA: Valencia.

ESTADO CIVIL: Casada con un marroquí desde 1992. Anteriormente lo estuvo con un español no musulmán.

HIJOS: Dos, de su primer matrimonio.

PROFESIÓN: Agente comercial de un negocio de distribución de vídeos.

ENCUENTRO CON EL ISLAM: Fue un proceso de búsqueda bastante largo. "Nunca entras en el Islam de forma rápida, debe ser poco a poco, relacionándote con musulmanes. Es la mejor forma. Se van rompiendo barreras, y ves que una cosa es lo que creías o veías en la televisión -porque tiene muy mala prensa- y otra lo que estás viendo. Yo acepté el Islam hace tres años".

ENTORNO Y FAMILIA: "Hay de todo, desde quien te rechaza abiertamente, a la figura del amigo/a paternalista que no sabe nada del tema y quiere salvarte no sabe de qué, hasta la persona que lo entiende y te dice `muy bien'. Mi madre, en ese sentido, fue excepcional... La primera reacción de mis hijos, que tiene 21 años y 24 años, no fue buena; luego, cuando vieron que era bueno para mí, les pareció bien".

PROTESTAS: "He coordinado el II Congreso de Mujeres Musulmanas, celebrado el pasado mes de noviembre, donde condenamos la violencia en general. Es un grito de protesta. Por un lado, no somos víctimas ni queremos serlo. Por otro, si por una cuestión religiosa, queremos ponernos un pañuelo en la cabeza, igual que otra mujer lleva un pañuelo en el cuello, ¿por qué eso supone que no puedo trabajar?".

VELO: Yo lo llevo. Hay tres tipos. Uno cultural y social, que se lleva en los países de mayoría musulmana y que muchas mujeres se ponen porque todas lo hacen. Otro, el impuesto , el que por desgracia toda la gente conoce y que hay que eliminar, el de No sin mi hija, vamos. Y el velo religioso, que es el que nosotras reivindicamos. Cualquier a tiene derecho a llevarlo en su vida privada o laboral. Significa un grado de compromiso con Dios y de evolución espiritual, una cuestión de pureza y de dignidad humana. Es el que llevamos libremente las mujeres que apostamos por esa opción".

VIOLENCIA: "Si eres un violador, un hombre violento, no te escondas bajo el Islam. Quienes ven esos maltratos no deben considerar que eso es el Islam, sino que esa persona está haciendo algo malo. No podemos generalizar ni comparar lo que pasa en Afganistán, Marruecos, Arabia Saudí...".

TALIBANES: "Por qué aparecen, quién está detrás, quién les financia..., debemos pensar en esto si queremos ser objetivos".

TRABAJO: "Si quieres tener un empleo debes quitarte el pañuelo. Diga lo que diga la Constitución, muy pocas personas tienen el privilegio de trabajar y no estar vetadas si visten, por cuestiones religiosas, de determinada forma. Es grave".

PROBLEMAS EN ESPAÑA: "El principal, el trabajo. Otro, ser considerado diferente; que me ponga un metro de tela no quiere decir que sea distinta de quien se lo quita. Cada uno tiene su filosofía y su forma de ver la vida. Y luego, la dificultad de educar a los niños sin que pierdan su identidad".

CAMBIOS: "A nivel laboral, ninguno. Estaba trabajando y lo he seguido haciendo. A nivel personal, sí. Estoy más tranquila, el cambio más importante es mi relación con con la familia, vecinos. El Islam incide mucho en el amor, la buena relación con los demás y ahora lo estoy practicando".

LABOR SOCIAL: Amparo colabora con un colectivo que ayuda a los musulmanes que han decidido venir a España. "Cuando llegan tienen problemas de todo tipo: legales, laborales, de vivienda, de identidad (primero se deslumbran y luego no saben dónde están) y culturales".

TÓPICOS DOLOROSOS: "Pues que somos terroristas, extremistas y fundamentalistas. Somos todo lo contrario, la nuestra es una religión de amor, de comprensión y de hermandad. Esto ocurre por falta de información, de estudio. Hasta ahora, en los colegios no se hablaba del legado histórico tan maravilloso que tuvimos con la etapa de Al Andalus".

¿QUÉ HA HALLADO EN EL ISLAM?: "Paz, amor y, sobre todo, muy buena relación. Ha llenado el vacío espiritual que sentía".

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