Lleva desde los 15 años enganchada al periodismo y ni mucho menos está cansada. A diario se pone delante de una cámara para informar y entretener. Adicta al trabajo, sí, pero también a su papel de madre: saca las uñas en cuanto se le toca a sus "niñas", Carmen y Terelu. Niega la fama de devorahombres, cascarrabias, criticona y, aunque le gusta el "artisteo", escucha a La oreja de Van Gogh y Deep Purple. Nacida en Tetuán, María Teresa es una andaluza de corazón que ríe con compás y contesta como lo que es, una profesional de las preguntas y las respuestas. Su edad es un tabú.

Por Jorge Javier Vázquez. Fotografía de Chema Conesa