Así somos, así nos vemos

Así somos, así nos vemos

ELLOS, SATISFECHOS CONSIGO MISMOS, a gusto con lo que la naturaleza -en cuestión de centímetros- les ha dado, benévolos con su físico y sus kilos, aunque sean de más por aquello de que las curvas -incluso asfaltadas con michelines- dan la felicidad. Ellas, más inconformistas, desearían pesar un poco menos, por eso superan a los varones en sus coqueteos con las dietas, aunque más de la mitad se apunta al "virgencita que me quede como estoy"; es decir, no quiere perder ni ganar peso. En un lado del ring, la media de los varones satisfechos con 77,5 kilos y 173 centímetros de altura, y en el otro, la media de las mujeres casi satisfechas con 63,5 kilos y 161 centímetros, seis menos de los que mide la media de la población (1,67). Así nos vemos y nos sentimos los españoles -con mirada masculina y femenina- ahora que es obligatorio ir en bañador y ligeros de ropa, según el estudio de opinión sobre la estatura, el peso y las dietas que Sigma Dos ha elaborado para LA REVISTA.

Los hombres son cada vez más europeos que las mujeres en la estatura; uno de cada cinco varones mide más de 1,79 metros y sólo un 3,3% tiene una estatura inferior al 1,60 metros; mientras que entre las mujeres casi un 30% no alcanza el 1,60 metros.

Esta tendencia europeista concuerda con los datos facilitados por el catedrático de Pediatría Manuel Hernández. Según este experto, los españoles han alcanzado su límite de estatura, ya que la talla final y el ritmo madurativo de los niños españoles se corresponde con la media de la población europea. La media de los varones españoles (176 cms.) coincide con la de los europeos (175 cms), por el contrario la altura de las españolas (161,5 cms.) es inferior a la de sus vecinas de continente (164 cms.). Este estudio longitudinal de crecimiento del catedrático Hernández sirve, desde hace años, de referencia en la mayoría de los hospitales, centros de salud y estudios infantiles de la Asociación Española de Pediatría y de las comunidades autónomas. Gracias a él se puede predecir la estatura adulta mediante la altura, el peso y el modelo de maduración ósea de un niño.

Según el estudio de Sigma Dos, la menor europeización femenina se debe, sobre todo, a su constitución fisiológica. Aunque ésta es más benévola con los jóvenes. Así que además de más guapos, sin arrugas y con mejores cuerpos, los españoles/as de entre 18 y 29 años son más altos. La estatura media de este grupo alcanza 1,77 metros (y alrededor de un 40% toca el techo de 1,80 metros o más) entre los varones, y un 1,64 metros entre las mujeres (un 3,5% del sexo femenino mide más de 1,79 metros). La llamada generación de posguerra todavía colea también en la estatura. Quienes se desarrollaron después de la Guerra Civil no pudieron crecer mucho. La media más baja se sitúa entre los 45 y 64 años: 1,69 metros entre los varones y 1,58 metros entre las mujeres.

Entre quienes se alimentaron con yogures enriquecidos y aquéllos que lo hicieron con la cartilla de racionamiento está el grupo de entre 30 y 44 años, cuya media es: 1,75 metros para ellos y 1,62 para ellas, aunque muchos de éstos en cuestión de centímetros están más cerca del racionamiento que del enriquecimiento lácteo.

La media de peso entre los hombres mayores de 18 años es de 77,5 kilos y el de las mujeres se sitúa en los 63,5. Si relacionamos el peso con la estatura, la media entre los varones más bajos (con menos de 1,70 metros) es de 73,2 kilos; la de los que miden entre 1,70 y 1,75 metros es de 76,6 kilos; y la de los más altos (a partir de 1,75 metros) es de 81,8 kilos. Efectuando la misma relación entre el peso y la estatura de las mujeres, la media entre las mujeres más bajas (por debajo de 1,60 metros) es de casi 62 kilos; la de las que miden entre 1,60 y 1,65 metros, de 63,2 kilos; y la de las más altas es de 64,6.

LOS KILOS JUSTOS

Algo más de la mitad de los varones españoles (51,9%) se siente con el peso adecuado; en este sentido se muestran más satisfechos con su peso que las mujeres (45,7%), ya que entre ellas es algo mayor el número de las que declaran que tienen un peso excesivo (13,5% ellas y un 6,9% ellos). Pero uno de cada tres hombres y una de cada tres mujeres consideran que pesan algo más de lo que debieran. El 48,7% de la población considera que lo que marca la báscula es lo que debe pesar.

Entre los más satisfechos se encuentran los jóvenes. Hasta casi el 70% de varones y cerca del 61% de la mujeres de entre 18 y 29 años están conformes con su peso frente al 39,3% de los mayores de 65 años y el 38,1% de las mayores de esta edad. Los hombres a partir de los 40 años se ven con exceso de peso o algo de sobrepeso en mayor grado (en torno al 40%), mientras que entre las mujeres es a partir de los 45 años.

Los años no sólo traen madurez física y psíquica, también se acompañan de una particular dote cuantificable en kilos y una menor conformidad con éstos. El peso medio aumenta en los distintos tramos de edad conforme se cumplen años. Entre los varones el cambio más significativo se produce a partir de los 30. Así, entre los 18 y los 29, los hombres pesan 75,7 kilos; entre 30 y 44 años se acercan a los 80 y a partir de los 44 pierden unos kilitos hasta aproximarse al peso medio de todo el conjunto de hombre: 77,5 kilos. Entre las mujeres la ganancia de peso más significativa se produce a partir de los 44 años.

HOMBRES Y MUJERES

En resumen: con el peso adecuado dice encontrarse el 51,9% de ellos y 45,7% de ellas; con algo de sobrepeso, el 35,7% de los hombres y el 33,5% de las mujeres; con excesivo peso el 6,9% de los varones y el 13,5% de las mujeres; por debajo del peso adecuado el 4,9% de ellos y el 6,6% de ellas.

Según la encuesta de Sigma Dos, una de las cosas que más preocupa es deshacerse de los kilos de más -sobre todo las mujeres-, y también, aunque en menor medida, ganar algunos más. Si al 35% de la población le interesa perder peso (frente al 60% que no quiere ni ganar ni perder), es entre las mujeres donde más sube este porcentaje hasta el 41,3%, especialmente en el grupo de edad media, mientras que en los hombres baja hasta el 28,3%.

Y en la relación entre peso y dietas es donde las diferencias entre los dos sexos se hacen más evidentes. Los datos de este estudio confirman la preocupación femenina: una de cada tres mujeres ha realizado una dieta para bajar de peso; es decir, el 34% de ellas frente al 15% de los hombres. La cifra sube hasta casi el 40% entre el grupo femenino de 30 a 44 años y baja hasta cerca del 30% entre las más jóvenes y las mayores de 65 años.

Curiosamente es en este último tramo de edad donde un mayor número de hombres confiesa haber realizado alguna vez una dieta para adelgazar (casi un 23%), aproximándose mucho a la media de la población total que ha realizado alguna vez una dieta para quitarse los kilos de más (24.6%).

Parece evidente que en cuestión de peso lo que más preocupa es el exceso, ya que sólo el 2,5% de los españoles se ha puesto a dieta para ganar kilos; por encima de esta media están las mujeres (con un 3,9%) y por debajo los hombres (con un escaso 1,1%). Entre los 30 y los 44 años casi un 8% de ellas se ha puesto a dieta para engordar y entre ellos el pico más alto (un 3,1%) se sitúa en el grupo de los 18 y 29 años.

Pero, ¿se pierden los kilos de más con las dietas? El 46,3% de la población afirma que sí y el 32,7% que no. Las mujeres -más preocupadas por el peso, según los datos de esta encuesta- están más convencidas que los hombres. La mitad de ellas considera que sí, frente al casi 33% de las que cree que no son efectivas. Casi el 43% de ellos está convencido de que las dietas son eficaces, mientras que uno de cada tres afirma que no lo son. Los más confiados son los hombres menores de 30 años (cerca del 59%) y las mujeres de entre 30 y 44 años (el 63%).

La edad y la experiencia hace de los mayores de 65 años los más descreídos (el 42,4% de los hombres y el 44,9% de las mujeres). Es curioso que un alto porcentaje de la población no sabe o no contesta a esta pregunta (21%).

Y después de deshacerse de los kilos indeseables ¿qué? Pues la satisfacción parece pasajera, ya que alrededor del 65% de la población considera que después de ponerse a plan lo normal es que se vuelva a engordar, frente al 18,5% que cree que el peso se mantiene. Otra vez, son las mujeres quienes están ligeramente más convencidas (el 66,6%) que los hombres (el 62,5%), y también son ellas las que creen en mayor medida que pueden mantener el peso alcanzado (el 20,1%) mientras que ellos se muestran más escépticos (el 16,8%).

Los kilos de más se cogen por múltiples causas. Los españoles piensan que se gana peso por hacer poco ejercicio físico (90%), por llevar una alimentación desordenada (88,4%), por problemas de constitución genética o fisiológica (82%) y por comer demasiado (76,8%).

Las mujeres dan más importancia al desorden en la alimentación (cerca del 91% achacan a este factor el aumento de peso). Para los hombres el responsable de los michelines es hacer poco ejercicio (91%). Sin embargo, la opinión de ambos sexos coincide en el momento de decidir el motivo que más influye a la hora de ganar peso: comer demasiado, (35,7% de los hombres y el 35% de la mujeres). En segundo lugar, hombres y mujeres mencionan el desorden en la alimentación, pero ellas dan más importancia a este motivo (32,8%) que los hombres (23,6%).

Así, más o menos dicen las encuestas que nos vemos y nos sentimos: ni muy altos ni muy bajos; ni muy gordos ni muy flacos, aunque muchos desearíamos tener unos centímetros más a lo alto y unos pocos menos a lo ancho.

Ficha técnica: Universo: personas mayores de 18 años. Ámbito: nacional. Muestra: 400 entrevistas telefónicas a hombres y 400 entrevistas a mujeres. Selección: polietápica, estratificada y aleatoria.

Índice de masa corporal Para saber si esos "kilitos" de más hacen que pasemos de "rellenitos" a obesos se usa el Índice de Masa Corporal (IMC), que consiste en dividir el peso corporal en kilos entre el cuadrado de la estatura en metros -peso (kg.)/estatura (m2)-. Así, una mujer con 75 kilos y 1,60 metros de estatura tiene un IMC de 29,3. Las personas con un Índice de Masa Corporal superior a 25 tienen sobrepeso, y si el IMC es superior a 30, suelen clasificarse como obesas. Según el informe de la Sociedad Española para el Estudio de la Obesidad, el 13,4% de la población española con edades comprendidas entre 25 y 60 años es obesa. Este estudio divide a la población en tres categorías, según su IMC: el 53% de los españoles tiene un peso adecuado ya que su IMC es igual o inferior a 25; el 39,5% se sitúa en un IMC de entre 25 y 30, es decir, padece sobrepeso; y el ya citado 13,4% supera el 30 de IMC. n

Reportaje

Datos


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