206 Motor & Viajes
sábado, 7 de julio de 2001
prueba
 
       
La marca británica ya tiene un modelo para poder competir con los Audi A4, BMW Serie 3 o Mercedes Clase C. Con este coche entra de lleno en la parte más alta del segmento, en la que pelean las variantes más potentes equipadas con motores de gasolina. La llegada de esta nueva berlina arrebatará a Audi el privilegio de ser la única que ofrecía tracción total

JAGUAR X TYPE 3.0 EXECUTIVE
Sobresaliente en comportamiento

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Sergio Piccione

Exteriormente es un auténtico Jaguar, sobre todo, en su frontal, que mantiene la esencia de la marca. En el interior también se reconoce el estilo tradicional del fabricante británico, pese a que se han hecho pequeñas concesiones para facilitar el montaje y, posiblemente también, para reducir costes. Por ello, se ha adaptado un cuadro de instrumentos en bloque, y no por marcadores separados. Sin embargo, el coche ha perdido esa sensación de desplazarse sobre una alfombra voladora, que hasta ahora tenían los Jaguar. Y es que la transmisión permanente a las cuatro ruedas, con ese mínimo de vibraciones que impone, la ha hecho desaparecer.

A pesar de esto, sería injusto decir que este modelo no ofrece un buen confort de marcha a sus ocupantes, porque realmente lo tiene. Incluso en la versión probada, que es de las denominadas Sport y que ofrece una suspensión más dura, con una altura de la carrocería rebajada entre cuatro y ocho milímetros y llantas de 17 pulgadas de diámetro con neumáticos de 225 con perfil 45.

Comportamiento. Una solución muy deportiva que contribuye, sin duda, a que el coche tenga ese sensacional comportamiento que se anuncia en titulares. Sin embargo, sería deseable que se pudiera disponer, también en esta versión de los neumáticos de 205 con perfil 55, montados en llantas de 16 pulgadas de diámetro, menos expuestas al deterioro en carreteras y calles bacheadas.

De cualquier forma, su manejabilidad, su agarre y su nobleza despertarán admiración en quien tenga la oportunidad de probarlo. Además, la dirección es rápida y precisa y los frenos excelentes, eficaces y aguantan bien los esfuerzos continuados. El coche es, en definitiva, una auténtica delicia para quien lo maneje, si a la persona en cuestión le gusta conducir.

Por una vez y sin que ello suponga dejar de considerar que el cambio manual es algo que empieza a pertenecer al pasado del automóvil, en este modelo, de perfil muy deportivo, hay que recomendarlo en detrimento del automático que equipaba la unidad probada y que, además, supone un incremento de precio de 373.000 pesetas. Pese a disponer del programa manual secuencial, como el resto de la gama Jaguar, no se adapta a una conducción deportiva. El nivel de automatismo que mantiene en el programa manual secuencial es tan alto que prácticamente es inútil utilizarlo.

Mecánica. El Jaguar equipa control de estabilidad ESP. Aunque el fabricante considera que su coche es tan seguro que no lo necesita, dada la creciente aceptación que tiene este elemento entre los usuarios, ha optado por ofrecerlo como opción. El ESP es desconectable, pero cuando las señales que el ordenador del coche recibe de los diferentes captadores indican una situación peligrosa, se conecta automáticamente, incluso cuando el conductor ha decidido cancelarlo. Esta es una contribución más a un comportamiento altamente seguro.

El motor está colocado en posición transversal y pasa sus 231 caballos al suelo por medio de una transmisión a las cuatro ruedas que, en condiciones normales, reparte un 40% de la potencia al eje delantero y el 60% restante, al trasero. Esta distribución permite ese comportamiento ágil del vehículo que tanto se ha ponderado.

En el otro lado de la balanza está la ya mencionada estrechez de sus interiores (ver recuadro superior). El X Type ofrece un volumen de carga superior, incluso, al de sus hermanos mayores, lo que tampoco quiere decir mucho porque este aspecto nunca ha sido el punto fuerte de la marca. El asiento posterior es abatible, dejando la posibilidad de llevar objetos largos. Su equipamiento es completo. La climatización automática, los airbag delanteros, laterales y de cortinilla, o el ABS son de serie.

HABITÁCULO
Aunque sus medidas permiten que cuatro adultos viajen con suficiente confort, no se puede decir que sea un coche amplio. La altura al techo es algo justa, en particular en las plazas traseras. Y tampoco sobra mucho en las delanteras. Por eso es conveniente no pedir el techo practicable. A esto hay que añadir una cierta dificultad para salir y entrar a las plazas traseras.

BASTIDOR
Aunque los ingenieros del fabricante británico han partido del bastidor del Ford Mondeo, no se puede decir que este coche sea un Mondeo con una carrocería diferente. Ha sido reforzado para poder superar las pruebas de choque que impone la legislación norteamericana y se ha acortado la distancia entre ejes, por lo que su longitud es cinco centímetros inferior a la del modelo de Ford.

SALPICADERO
Tiene un claro estilo Jaguar, con el acabado en madera que, en el caso de las versiones Sport –como la probada– está teñida en tonos negros, lo que no a todo el mundo gusta. Como pequeña crítica se puede señalar que la instrumentación está empotrada en el salpicadero en bloque, y no con cada reloj por separado, como era tradicional en la marca.


FICHA TÉCNICA / 7.138.000 pesetas (42.900 euros)

Motor: Delantero transversal de seis cilindros en V.
Cilindrada: 2.967 centímetros cúbicos.
Alimentación: Inyección multipunto.
Potencia: 231 caballos a 6.800 rpm.
Transmisión: Tracción total permanente.
Caja de cambios: Automática de cinco velocidades.
Suspensiones: Delantera de tipo MacPherson y trasera de multibrazo, con doble tirante transversal inferior, brazo superior y tirante longitudinal.
Dirección: De cremallera, asistida. Diámetro de giro de 10,8 metros.
Frenos: Discos ventilados en las ruedas delanteras y discos en las traseras.
Peso: 1.595 kilos.
Capacidad del maletero: 452 litros.
Depósito de combustible: 61 litros.

+COMPORTAMIENTO. Irreprochable. El coche es ágil y dócil a las indicaciones del conductor. La tracción a las cuatro ruedas le confiere una seguridad extra, que no merma su manejabilidad.

-HABITABILIDAD. El espacio interior resulta justo para cuatro adultos. La altura de las plazas posteriores es crítica y el acceso y la salida de las mismas complicada a causa del pilar B.

VELOCIDAD: 219,8 km/h.
CONSUMOS: Urbano, 15,5 litros cada 100 kilómetros. Extraurbano, 9,0 litros. Medio, 12,9 litros.
ACELERACIONES: 400 metros salida parada, 15,8 segundos. 1.000 metros, 28,4 segundos.
RECUPERACIONESDe 80 a 120 km/h. en D, 6,2 segundos.

Conclusión ****
Atractivo y bien presentado y equipado, quien lo conduzca quedará encantado de la nobleza de su comportamiento, su docilidad y seguridad. Es perfecto (en su versión con cambio manual) para quien le guste conducir. Quienes busquen otras cualidades que también han sido típicas de Jaguar, como la suavidad de la suspensión, pueden quedar decepcionados.


SUS RIVALES

AUDI A4. Lo supera en maletero y habitabilidad, aunque sus plazas posteriores también tienen problemas de acceso. Pero es inferior en comportamiento. Excelente el cambio automático.

BMW SERIE 3. Es comparable en habitabilidad, pero tiene un maletero mayor. Su comportamiento es excelente, aunque sea tracción trasera. El cambio automático es muy bueno.

MERCEDES CLASE C. Es el más «tranquilo» de los cuatro coches. Es superior al británico en habitabilidad y maletero. El funcionamiento de su cambio automático es similar al del Jaguar.

 



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