TOYOTA LAND CRUISER.
La tradición reinventada
Con medio siglo a sus espaldas, el fabricante japonés rehace su emblemático todoterreno, esta vez dotándolo de un sinfín de ayudas electrónicas a la conducción
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MIGUEL A. TURCI
Que la electrónica es hoy en día una parte muy importante del automóvil es un hecho indiscutible. Que Toyota haya dotado al nuevo Land Cruiser de complejos sistemas de ayuda a la conducción basados en ella es la prueba irrefutable de que los circuitos impresos, las tarjetas, el software y el hardware son palabras corrientes en la creación de este nuevo modelo. Ejemplo de que la electrónica es la base de cualquier nuevo producto que pretende ser líder en su segmento.
EL MÁS FIABLE
El Land Cruiser pasa por ser el vehículo más fiable de la historia de los todoterreno, y si el hecho de que a esta nueva generación se la haya dotado de excesivos ingenios electrónicos puede plantear alguna duda en cuanto a su fama futura, valgan las palabras del ingeniero jefe de Land Cruiser, Kunihiro Hoshi, al respecto: «La electrónica no ha aparecido de repente en Toyota, y la que incorpora este nuevo modelo está lo suficientemente probada como para que no plantee problemas de ningún tipo».
Hoshi y su equipo se plantearon tres alternativas a la hora de desarrollar el nuevo Land Cruiser. Una, la que atendía a las modas y transformaría el coche en un SUV (Sport Utility Vehicle) perdiendo su personalidad de todo terreno extremo. Otra suponía ignorar las actuales tendencias y seguir en la línea de lo hecho hasta ahora. La tercera buscaba aunar resistencia, solidez y tradición off road con lo que pide hoy en día un comprador de SUV, es decir, confort, diseño y buen comportamiento en carretera. Y todo ello sin defraudar a quien, como usuario de Land Cruiser, exige unos niveles de resistencia poco comunes, los hasta ahora ofrecidos y garantes de esa proverbial fiabilidad. Esta última vía fue la elegida, una alternativa que sin duda amplía la personalidad de este vehículo.
DAC, HAC, A-TRAC, VSC, TEMS, y alguno que no se nombra por ya conocido, son los acrónimos que preceden cualquier explicación sobre el comportamiento real del coche en cualquier terreno que acometa. El control de asistencia para descenso, aquel que se encarga de la asistencia para arranques en pendiente, el control de tracción activo y el de estabilidad, además del sistema de suspensión inteligente hacen del nuevo Land Cruiser un coche sorprendente en cualquier terreno. Su capacidad para pasar por lugares impracticables es sobresaliente. Pendientes de hasta 42 grados de inclinación, barro (todo el del mundo, lo pudimos comprobar sobre el terreno), vadeos y mil obstáculos son lo habitual para este prodigio electrónico y, todo, con un nivel de confort digno de mención.
DOS CARROCERÍAS
Con tres o cinco puertas, un motor diesel 3.0 D4-D de 163 caballos (llegará el 16 de enero) y otro de gasolina V6 de cuatro litros y 249 caballos (13 de marzo), tres niveles de acabado (GX, VX, y VXL) y unos precios que, aunque todavía no comunicados prometen ser muy competitivos, los nuevos Land Cruiser recogen el testigo del anterior modelo para una nueva época. Depositada su confianza en el nuevo producto, Toyota España fija unos mínimos de venta para los próximos cinco años de alrededor de 5.000 unidades anuales, de las que la motorización diesel supone más del 90%. Un propulsor éste que en una primera toma de contacto se pudo comprobar que ofrece potencia suficiente para la práctica del todoterreno y suavidad a raudales en carretera.
MÁS DE 50 AÑOS EN LA CARRETERA
Dicen que el Land Cruiser es el coche que más carreteras ha recorrido en el mundo. Sea verdad o no, lo que sí es historia son sus 51 años de vida, medio siglo en el que el Land Cruiser se ha ganado varios apodos, siempre originados en su fiabilidad. En EEUU, Moose (alce) fue el sobrenombre de la serie 50; en China lo llamaron Shamowang (rey del desierto); en latinoamérica se distinguió con varios apodos, El macho, y en Brasil, Bandeirante, que así llamaron a los pioneros portugueses hace siglos. De una forma u otra, el Land Cruiser es ya un mito de la historia del automóvil y lo es por ser la montura de mil aventureros, de otros tiempos y de ahora. Coches que recorren 900 kilómetros diarios por las carreteras australianas. Otros, adaptados a los techos de las minas, pasan sus días sin ver el cielo en las simas de las explotaciones de Sudáfrica... Desiertos de arena y hielo, polvo, barro, condiciones extremas son las que han hecho la historia de este coche.
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