Un suplemento de EL MUNDO  Un servicio de 
 DIRECTORIO   Domingo 21 de septiembre de 2003, número 304
Portada
Números Anteriores
 OTROS SUPLEMENTOS
Magazine
Crónica
El Cultural
Su Vivienda
Nueva Economía
Motor
Viajes
Salud
Ariadna
La Luna
Aula
Campus
 OTROS MUNDOS
elmundo.es
elmundodinero
elmundolibro
elmundoviajes
elmundodeporte
elmundosalud
elmundovino
medscape
elmundomotor
Emisión Digital
Metrópoli
Expansión&Empleo
Navegante
mundofree
elmundo personal
juegos: level51
elmundomóvil
 
Europa se rinde al cambio automático
TRANSMISIONES. Mientras en EEUU el 90% de las cajas de cambios son automáticas, en Europa esta cifra es sólo del 20%. Pero las transmisiones automáticas ganan terreno, y número de marchas, en el Viejo Continente, como demuestra la 7G-Tronic de Mercedes.
JAIME LÓPEZ
ALFA ROMEO 166 / SELESPEED. El cambio estrella de la marca más deportiva de Fiat es el Selespeed. Es una caja automática de seis velocidades con mando secuencial, en la palanca y en el volante. Se basa en un sistema electrohidráulico para el movimiento del cambio y del embrague, más una centralita.
   

Conseguir que un automóvil circule de forma eficiente a cualquier velocidad, es y sigue siendo el gran reto de las cajas de cambios. Un componente imprescindible en el automóvil. Sin ellas, el motor carecería de flexibilidad, se desperdiciaría mucha potencia, las mecánicas se deteriorarían con rapidez y los viajes serían una tortura.
Los primeros vehículos carecían de este tipo de transmisiones. La primera caja fue instalada en un coche Daimler por René Panhard y Emile Levassor en 1895. También fueron ellos los primeros en colocar el motor en el morro del vehículo y dotarlo de propulsión trasera, una fórmula que perduró muchas décadas.


En un primer momento todas las cajas fueron manuales. Sin embargo, en 1902 el francés Louis Bonneville dibujó los planos de la primera caja automática de la que se tiene noticia. Tres años más tarde, y en Estados Unidos, se aprovechó el trabajo del francés para fabricar la primera caja automática conocida. Utilizaba, como las actuales, embrage hidráulico y convertidor de par (torque converter).



UNA CAJA, DOS SISTEMAS

Esta primicia también marcó el inicio de la especialización de Europa en las cajas manuales, mientras que los estadounidenses mostraron una cierta predilección por las automáticas.


No obstante, en el Viejo Continente, las marcas de lujo también recurrieron a este tipo de transmisión, aunque con más parsimonia. Así, el Rolls Royce Sedan 20/30, de 1933, fue el primer vehículo de esta prestigiosa casa que montó uno de estos dispositivos.


Pero a pesar de estas tímidas incursiones fue en el Nuevo Mundo donde las cajas automáticas evolucionaron más rápidamente, junto con otros dispositivos destinados a hacer más cómoda la vida a bordo del automóvil, como el aire acondicionado, elevalunas eléctricos, asientos regulables, etcétera. En un principio, se trataban de transmisiones de tres velocidades, muy limitadas en cuanto a prestaciones. Esto no era un problema real en un país donde la gasolina costaba algo más que el agua y se imponía el binomio motor V8 y caja automática.


En Europa, mientras tanto, los fabricantes estaban inmersos en solventar los males iniciales de las cajas de cambio manuales: mucho peso y poca precisión. Las transmisiones manuales maduraron a la misma velocidad a la que lo hizo el motor de cuatro cilindros.


Esta dinámica se mantuvo hasta mediados del siglo XX, en que los fabricantes europeos también comenzaron a interesarse por este tipo de cajas. Pero no fue hasta la década de los 90 cuando las transmisiones europeas dejaron claramente atrás a las norteamericanas.


Desde entonces, las cajas manuales han ido cediendo terreno cada año. Según un informe de la consultora estadounidense JD Power, la sventa de coches con transmisión automática en Europa crecerán desde el 20% actual hasta el 50% en 2010, una cifra muy alejada de la cuota de mercado que poseen, a día de hoy, EEUU y Japón, donde un 90% y un 70%, respectivamente, de los coches incorporan caja de cambios automática.



LLEGADA DE LA ELECTRÓNICA

Pero el gran cambio ha lleghado al mundo de las cajas automáticas de la mano de la electrónica. Las nuevas tecnologías son capaces de leer y ejecutar los deseos del conductor, gracias a lo que se conoce como las leyes de paso o de cambio. Es decir, las condiciones que se deben cumplir para que el gestor electrónico del sistema de transmisión apruebe el cambio de marcha.


Los ensayos realizados han demostrado que algunos de estos cerebros electrónicos son capaces de gestionar la potencia, igualando a expertos conductores. Esta exactitud en el cambio de relación además, tiene el beneficio añadido de proteger al motor del coche, ya que están programados para evitar los dañinos sobrerregiménes.


En segundo lugar, el esfuerzo realizado por los fabricantes de automóviles y componentes ha desembocado en transmisiones automáticas más precisas y en nuevas cajas que ofrecen mayores dosis de comodidad y deportividad. Un ejemplo son las transmisiones automáticas secuenciales.


El origen de este cambio se remonta a la Fórmula 1. Tras la presentación del equipo Ferrari de la primera caja secuencial, este sistema se extendió rápidamente a todas las escuderías. Estas transmisiones no presciden del embrague tradicional, de fricción, sino del pedal que lo maneja. Al confiar la maniobra de desembragar a sistemas electrohidraúlicos, el cambio de marcha resulta mucho más rápido que el efectuado por el pie humano.


El último de los frentes abierto por los fabricantes afecta no tanto al tipo de cambio, sino al número de marchas. Los ingenieros de Mercedes han sido los primeros, pero ZF, el principal productor de cajas de cambios, presentó también en el Salón Internacional de Francfort otra transmisión automática con siete relaciones.


Para mejorar las prestaciones del motor, tanto Mercedes, con su caja 7G-Tronic (sobre estas líneas), como ZF han optado por aumentar hasta siete el número de marchas para optimizar el consumo y la elasticidad del motor. Con un mayor número de relaciones, es posible mantener siempre al propulsor lo más cerca posible del régimen de par máximo, que es aquel en la que el vehículo tiene mayor capacidad de recuperación y de aceleración.



ZF: LOS HITOS DE UN LÍDER

1914.El uso de las cajas de cambio se generalizan en aviones y vehículos militares.

1916. ZF produce las primeras unidades de transmisiones para automóviles.

1921. Se fabrica la primera caja de cuatro marchas con sistema de preselección.

1931.Se diseñan cajas en donde no se tenga que cambiar de marcha con doble embrague.

1942. ZF equipa a los tanques nazis «Panzer» con sus sistemas de transmisión.

1945. Se diseña la caja de cinco marchas llamada E-Types, que incorporarán, acabada la II Guerra Mundial, los tanques franceses «AMX».

1951. Aparece la primera caja de cambios con seis relaciones, compuesta con un embrague de disco de acero.

1953. El modelos de Mercedes S6-55 equipa la transmisión ZF-A; la primera que emplea un cambio completamente sincronizado.

1955.La caja de seis marchas con embrague de disco de acero se monta en más de 1.000 trenes de la Federal Railway System.

1965. Produce la primera caja automática de tres velocidades con conversor de par. Peugeot y BMW fueron los primeros fabricantes en incorporar este cambio.

1968. El volumen de la exportaciones alcanza por primera vez el 30% de la facturación total. Estados Unidos se incorpora a la lista de los países clientes de esta empresa.

1969. Se montan cajas de cambios sincronizadas de cinco velocidades denominadas 5DS 10, en los vehículos diseñados por el inglés John Cooper y en el mítico modelo Ford GT 40.

1970. Por primera vez en la historia del grupo alemán, la facturación excede de los 1.000 millones de marcos, tras doblar su montante en un periodo de cinco años.

1973. ZF trabaja en una nueva caja de cambios a partir de su modelo 3H 12. Denominada 3H 22, ofrece un 75% más de capacidad de transmisión.

1976. La compañía ZF adopta su actual anagrama: las iniciales dentro de un círculo blanco inscrito en un cuadrado negro.

1979. El fabricante alemán Opel otorga a ZF el título de proveedor del año (1978).

1982.Se constituye ZF España instalada en Coslada (Madrid). Este mismo año también se lanza la primera unidad automática de cuatro velocidades que es montada por BMW, Volvo, Jaguar, Peugeot y Rover.

1983. ZF produce la primera transmisión inteligente de cuatro marchas que equipa el BMW 745. Este modelo permite elegir entre modo económico, deportivo y manual.

1984. La empresa alemana lanza una caja para coches con tracción delantera y motor transversal. Citroën y Daewoo figuran entre sus clientes.

1985. Comienza la producción de la caja Ecolite, de la que hasta hoy se han producido más de un millón de unidades.

1988. Aparece la 4HP 24 A, destinada al Audi V8 de tracción total. El nuevo Corvette monta también la caja S6-40, destinada a vehículos de altas prestaciones.

1990. Se presenta la 5HP 18 para turismos, que se distingue por su gran eficiencia.

1995. Aparece en el mercado la primera caja automática de cinco velocidades para vehículos con tracción delantera –5HP 19FL– y otra versión para modelos con tracción total.

1999. Presentada en Hannover, aparece la primera caja automática de seis velocidades –6HP 26– para turismos. Es un 13% más ligera y un 30% con menos piezas que sus predecesoras.

2003.ZF desarrolla una caja automática de siete relaciones basada en su modelo anterior.

TIPOS DE CAJAS DE CAMBIO

MANUAL: La transmisión manual se basa en engranajes desplazables. Está formada por dos ejes dotados de piñones fijos y desplazables de diferentes tamaños. Actualmente, conviven en el mercado cajas manuales de cinco y de seis marchas hacia delante, y una hacia atrás.

AUTOMÁTICO: En la caja automática el embrague, en lugar de ser de fricción, es hidráulico combinado con un convertidor de par. Un regulador controlado por la presión ejercida sobre el pedal del acelerador selecciona las marchas a través de un sistema de válvulas distribuidoras.

SECUENCIAL: Con el fin de buscar mayores dosis de deportividad, los fabricantes han adoptado este tipo de cambio, herencia de la Fórmula 1. Dependiendo de la marca, se cambia de marcha con toques de la palanca hacia arriba o hacia abajo, o con desplazamientos laterales.

 
  © Mundinteractivos, S.A. - Política de privacidad
 
  C/ Pradillo, 42. 28002 Madrid. ESPAÑA
Tfno.: (34) 915864800 Fax: (34) 915864848
E-mail: motor@elmundo.es