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| PERIPLO EUROPEO DEL HYDROGEN 3 |
| Hidrógeno en las alas |
| Un redactor del suplemento Motor pudo conducir el prototipo de General Motors en el trayecto entre Zaragoza y Madrid. |
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CARLOS CANCELA
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El vehículo, basado en la plataforma del Opel Zafira, demostró su viabilidad recorriendo varios países europeos. |
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El coche movido por hidrógeno, el combustible alternativo a los derivados del petróleo, es ya una realidad aunque aún se encuentra en una fase experimental. General Motors lo ha demostrado realizando un maratón que ha atravesado toda Europa desde las frías tierras noruegas hasta Portugal. Este periodista tuvo el privilegio de recorrer una pequeña parte de este recorrido –el trayecto Zaragoza-Madrid– al volante del Hydrogen 3, basado en la plataforma del Opel Zafira pero con un sistema de pila de combustible y un motor eléctrico.
Para ponerlo en marcha, se gira la llave como si de un coche normal se tratara, pero el ruido no existe. Al cabo de unos segundos una pantalla de control en la consola nos indica que las células de combustible comienzan su funcionamiento correcto. Quitamos el freno de mano y sólo tenemos que accionar una flecha hacia delante.
Con ello ya se puede comenzar a acelerar, eso sí, con cautela para ver las primeras reacciones. Aparte de la ausencia de ruido, lo más destacable es la suavidad con que el coche responde a las solicitaciones del conductor.
En ciudad es donde más se agradece contar con un motor eléctrico. Ya en carretera comenzamos a rodar por una autovía de calzada desdoblada con muchas subidas y descensos, lo que obligaba a ir muy pendiente del velocímetro. Nuestro ingeniero nos había indicado que debíamos rodar entre 120 y 130 km/h y en varios momentos tuvo que reprendernos levemente por superar esta velocidad.
AUTONOMÍA
En la configuración que llevaba este vehículo, la denominada liquid, la autonomía superaba por poco los 200 kilómetros –con el depósito grande llega a 300–, lo que obligó a realizar un repostaje a mitad de camino. Para esta operación es preciso un camión que alberga un depósito de hidrógeno a 250º bajo cero. Después de cinco minutos, pudimos reemprender la marcha hacia Madrid.
Opel ha producido ya 20 unidades de su coche de hidrógeno, algunas de las cuales hacen servicios en Washington o Tokio dentro del más duro tráfico rodado. Y otros fabricantes como Mercedes, Toyota o Nissan siguen en esta misma senda, que para los analistas del sector supone el futuro del automóvil y que estará disponible a partir del año 2010.
Sólo falta que los gobiernos apoyen esta iniciativa y pongan al alcance de los ciudadanos las infraestructuras para que el hidrógeno ocupe el lugar de los derivados del petróleo. El medio ambiente lo agradecerá sin duda.
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