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Foto: Repsol YPF
BRUSELAS.- La petrolera Repsol YPF ha accedido, a instancias de la Comisión Europea, a liberar a centenares de estaciones de servicio de los contratos de suministro exclusivo a largo plazo que mantenía con ellas.
Bruselas ha decidido, en consecuencia, cerrar la investigación que había abierto sobre este tipo de contratos y considerar "de obligado cumplimiento" los compromisos suscritos por Repsol.
La aplicación de estos compromisos permitirá por vez primera a un gran número de estaciones de servicio en España una posibilidad real de elegir a sus proveedores y garantizará que puedan ofrecer descuentos.
En un comunicado, la CE afirmó que merced a esta iniciativa "el consumidor gozará de mayor elección y precios más bajos".
La comisaria europea de Competencia, Neelie Kroes, recordó que el sector español de las gasolineras se veía hasta ahora "obstaculizado" por ese tipo de acuerdos, y Repsol, al aceptar "renunciar a todos ellos" permitirá restaurar la competencia en un gran número de estaciones de servicio "en beneficio de los consumidores".
Repsol se ha comprometido a permitir que todas las estaciones de servicio con las que tiene acuerdos de suministro a largo plazo rescindan estos contratos a cambio de ser compensada económicamente.
No obstante, el mecanismo para calcular la compensación se ha concebido de forma que se ofrezca a las estaciones de servicio un incentivo económico para rescindir sus contratos a largo plazo.
Además, Repsol no firmará ningún nuevo contrato de suministro exclusivo de más de cinco años. Asimismo, la compañía se abstendrá de adquirir estaciones de servicio a las que no suministre productos. Por último, dará a las estaciones de servicio de su red total libertad para ofrecer descuentos en los precios minoristas.
El Ejecutivo comunitario recordó que, si Repsol vulnerara sus compromisos, podría imponerle una multa de hasta el 10% del volumen total de negocios de la empresa sin necesidad de demostrar que se ha producido una infracción de las normas de competencia comunitarias.
El acuerdo alcanzado permitirá a la petrolera hispano-argentina adaptarse a las exigencias del Reglamento comunitario que regula la liberalización del mercado de distribución minorista de carburantes.
Este Reglamento, aprobado en 1999, obliga a las petroleras con una cuota de mercado superior al 30% a limitar a cinco años la duración de los contratos de suministro en exclusiva firmados con sus gasolineras abanderadas.
En el caso de Repsol YPF, la duración de los contratos era de 25 años, un plazo que, según Bruselas, resultaba excesivo y dificultaba la competencia.
Por otra parte, los propietarios de estaciones de servicio pidieron a Repsol YPF que cumpla también la resolución del Tribunal de Defensa de la Competencia (TDC) y la sentencia del Tribunal Supremo que le obligan a dejar de fijar los precios de los carburantes a sus gasolineras abanderadas.
Mariano Aguayo, que representa a la mayoría de las gasolineras, dijo que el compromiso alcanzado con la CE "no debe servir de excusa" para que la petrolera no cumpla también lo establecido por el TDC y el Tribunal Supremo.
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