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LOS CORTES SE REALIZARON CON UNA MOTOSIERRA
Telefónica denuncia el sabotaje de su red de fibra óptica

El tráfico de telefonía e Internet, afectado por el corte 'intencionado' de varias de sus líneas

OLALLA CERNUDA

MADRID.- Más de la mitad de la población española ha sufrido diversos fallos en las líneas telefónicas y de Internet después del sabotaje de más de 48 cables de fibra óptica, el corazón de las telecomunicaciones en España. Los cortes, realizados con una motosierra y de forma simultánea en al menos 4 lugares distintos, dejaron prácticamente incomunicadas a 15 provincias del Norte de España.

Aunque Telefónica informó de que la avería estaría reparada a las 22.00, en algunos municipios de Madrid, la comunicación seguía sin reestablecerse. A primeras horas del sábado, la compañía aseguraba que el servicio estaba completamente restablecido y que se está investigando la autoría del sabotaje.

Según fuentes de Telefónica, los cortes fueron «intencionados» y se produjeron en el entorno de las centrales de Almenara y Campamento, en Madrid capital, así como en los municipios de Móstoles y Alcobendas. «No se trata de una avería producida por una excavadora, ni por una cosechadora, como ocurre en otras ocasiones, porque han sido varios cortes simultáneos y muy limpios», aseguró un portavoz de la compañía. De hecho, fuentes de la operadora confirmaron que el arma del crimen fue una motosierra.

El sabotaje no sólo afectó a los servicios de telefonía fija, móvil e Internet. Los aeropuertos de Galicia sufrieron retrasos de hasta 210 minutos por los fallos de comunicaciones, y un elevado número de cajeros automáticos dejaron de funcionar en toda España, especialmente en las zonas rurales.

Los servicios técnicos de Telefónica detectaron «hasta 4 puntos de corte diferentes, que podrían afectar a 48 cables de fibra óptica». Sin embargo, fuentes no oficiales de la compañía hablan de un número más elevado de cortes, que incluso podrían haber afectado a 64 cables.

Varias poblaciones de Madrid, como Colmenar Viejo, estuvieron gran parte de la tarde sin teléfono.

Según ha podido saber ELMUNDO, los cables están a una profundidad de entre 50 y 60 cm, con lo que sabiendo su localización exacta, es relativamente sencillo cortarlos. Cada línea de fibra óptica, revestida de PVC, contiene en su interior varios cables. Para protegerla de cortes accidentales, está protegida por un blindaje de una malla de acero.

El primer corte se produjo a las 13.13 horas en la zona de Alcobendas. Posteriormente, la red de fibra volvió a ser saboteada a las 13.23 y a las 13.38 horas en la zona de Almenara, al norte de Madrid, y a las 14.35 en las proximidades de las centrales de Campamento y Móstoles, ambas en el extrarradio de la capital.

Preámbulo de la huelga

Desde el momento en que tuvo conocimiento de los cortes, Telefónica constituyó un Gabinete de Control desde el que se coordinó todas las actuaciones para la recuperación del servicio en el menor tiempo posible. En este operativo participaron más de 300 técnicos de distintas especialidades.

A última hora de la tarde, los responsables técnicos habían logrado reestablecer el servicio internacional, pero todavía persistían algunos problemas en las conexiones interprovinciales y de Internet a través de ADSL.

Por su parte, nada más tener conocimiento del alcance del sabotaje el Ministerio de Ciencia y Tecnología reunió al comité de Planes Sectoriales de Emergencia para analizar la situación y estudiar posibles soluciones.

La ministra Anna Birulés, presidenta de ese comité, recomendó a los operadores que pusieran inmediatamente en marcha los planes de seguridad previstos para ocasiones especiales, como la huelga general.

Aunque desde la empresa no han querido hacer valoraciones sobre la autoría del sabotaje, ni su posible vinculación con la huelga general del próximo 20-J, fuentes del sector han considerado los actos de sabotaje «un preámbulo de la huelga general». Mientras tanto, la compañía telefónica ha anunciado que denunciará ante las autoridades judiciales estos actos.

Los problemas de funcionamiento no han sido exclusivos de la telefonía fija, ya que en la móvil también se han registrado algunas incidencias. Así, Telefónica Móviles registró una caída temporal por saturación de la red durante gran parte de la tarde de ayer.

Aunque fuentes de la compañía aseguran que «todo funcionó correctamente», fueron decenas las quejas recibidas de usuarios que permanecieron gran parte del día sin servicio.

Los actos de sabotaje también habrían afectado a empresas de la competencia. Así, Vodafone, la segunda operadora española de telefonía móvil, también registró algunos problemas de red por la mañana.

Precedentes

Esta no es la primera ocasión en la que Telefónica tiene que hacer frente a actos de sabotaje en su red. En enero de 1999, miles de usuarios se vieron afectados por una interrupción en el servicio que se prolongó durante varias horas.

En los primeros momentos, la compañía aseguró que la interrupción se debía al corte accidental de unos cables por una excavadora. Sin embargo, unos documentos internos de la empresa reconocían el «corte intencionado de 5 cables».

Según fuentes de la compañía, las averías de 1999 produjeron una alarma de «nivel 8» en Telefónica. El «nivel 9» es el más alto e implicaría una situación de colapso en la red nacional, además de la obligatoriedad de ponerse en contacto con el Presidente del Gobierno.

 
     
 
 




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