Domingo, 3 de octubre de 1999


REPORTAJE | MILLONARIOS ESPAÑOLES EN LA TREINTENA

DAVID DEL VAL, 30

Especialista en compresión de vídeo de Microsoft
Fue uno de los pioneros en tecnología de compresión de vídeo, que desarrolló en su empresa VXtreme. Microsoft la adquirió por 10.000 millones de pesetas a los dos años de haberse creado

SOLEDAD MAYORAL

Hizo la maleta y se fue con una beca y una idea debajo del brazo a la Universidad californiana de Stanford (EEUU). Este equipaje se hubiera quedado probablemente en una buena intención, si el billete lo hubiera devuelto a España; pero no, lo dejó en el corazón de un hervidero tecnológico, empeñado en enseñar al mundo que los grandes proyectos se pueden hacer realidad. Su idea le llevaría a convertirse en uno de los pioneros en tecnología de compresión de vídeo. Un proyecto que ya había despertado su interés en España.

Una vez acabados sus estudios en Telecomunicaciones, aterrizó en Stanford, donde conoció a un profesor que también estaba interesado en el mismo proyecto. Se unieron a otros socios más y montaron una empresa en un ruidoso garaje lleno de máquinas que tenía la Universidad. “Éramos tres indios y yo. Así que yo resultaba de lo más exótico”.

Después de trabajar duramente durante un año, sólo se permitía el lujo de parar una hora para comer, se corrió la voz en el Valle de que estaban trabajando en un buen sistema. Les llegó la financiación y crearon la empresa. Aquella fue una época dura, en la que no se dejaba de trabajar. “Me acuerdo de que mis compañeros paraban un momento para acostar a los niños y luego volvían al garaje”.

En un año ya tenían 90 empleados contratados. Otro año más y el gigante Microsoft se fijó en ellos y los compró. A partir de ahí, comienza la leyenda. Nadie ha querido dar la cifra exacta, pero los rumores apuntan a que Del Val y sus socios se embolsaron 10.000 millones de pesetas. Pero este cuento con final feliz está salpicado de momentos amargos. “La empresa creció muy rápidamente y comenzó a haber tensiones. Tuvimos que despedir a la directora general porque nos dimos cuenta de que no funcionaba. Fue muy duro, ella había estado con nosotros desde el principio”.

Los problemas continuaron y uno de los socios decidió dejar la empresa; entregó sus acciones y se marchó. “No podíamos trabajar juntos, pero nos seguimos viendo y le va muy bien. Lo curioso es que a los tres meses ya estaba montando otra empresa”.

La falta de este espíritu innovador es lo que más le molesta de España a David del Val. “El dinamismo procede muchas veces de la gente joven y en la universidad no se les comunica a los estudiantes ese espíritu emprendedor. Todos quieren trabajar en una multinacional, comprarse un piso y un coche. Pero no pasa nada por llegar a los 30 y no tener nada de eso. Aquí la gente, que termina la carrera en una situación económica mucho peor porque tienen que pagar los créditos de estudios, no piensa en tener un trabajo seguro. La gente primero prueba”.

La vida de David del Val ha adquirido un tono más sereno desde que forma parte de la empresa de Bill Gates. Trabaja una media de nueve horas al día, se toma libres los fines de semana e incluso ha podido ir a la India para la boda de uno de sus socios. “No creas que tuve que buscar tiempo”. Pero en su rutina todavía no han penetrado los hoteles de lujo, los carísimos restaurantes ni los años sabáticos. “Si trabajar me motiva, ¿por qué me voy a privar de ello?”.

LOS PROTAGONISTAS
CARLOS BARRABES, 29
Propietario de Barrabes.com
MARCOS GUILLEN, 28
Director de Red Internauta
MIKEL AMIGOT, 35
Director de "La Brújula"
DAVID DEL VAL, 30
Especialista en compresión de vídeo de Microsoft
PEP VALLES, 36
Fundador del portal ¡Olé!
FERNANDO LLAMAS, 31 Director de Ozú