El Mundo
279 
5-02-1998



Navegante
de salud



Enviar mensajes

salud@el-mundo.es


  SmithKline Beecham


SALUD DE LA MUJER

Suplementos cardiosaludables

La vitamina B6 y el folato disminuyen el riesgo de enfermedad cardiovascular
________________________

Un equipo de científicos acaba de publicar un estudio en el último "JAMA" que sugiere que los suplementos de ácido fólico y vitamina B6 en la comida pueden proteger la salud cardiaca de la mujer.

PABLO JAUREGUI

 

En un futuro próximo, es muy probable que los médicos empiecen a recomendar a las mujeres un suplemento adicional de vitamina B6 y folato para proteger la salud del corazón. Un equipo de científicos acaba de demostrar que estas sustancias pueden disminuir considerablemente el riesgo de padecer infartos y enfermedades coronarias.

El estudio de estos investigadores, que se ha publicado en el número de ayer del Journal of the American Medical Association (JAMA), comenzó en el año 1980, cuando más de 80.000 enfermeras estadounidenses rellenaron un cuestionario detallado sobre sus hábitos de alimentación. De esta forma, se estableció la cantidad de vitamina B6 y folato que consumían regularmente en sus dietas.

Posteriormente, durante 14 años, el doctor Eric Rimm y sus colegas de la Escuela de Salud Pública de Harvard mantuvieron a 80.082 mujeres bajo su observación. A lo largo de este tiempo, se produjeron 658 casos de infarto sin fallecimiento, y 281 casos de enfermedad coronaria mortal.

Sin embargo, el riesgo de padecer estos trastornos era muy inferior en las mujeres que consumían una dieta con un contenido alto de folato y vitamina B6. Cuanto más alto era el consumo de estos alimentos, menor era la probabilidad de sufrir un infarto.

"Nuestros resultados sugieren que una ingestión de folato y vitamina B6 por encima de lo que se suele recomendar habitualmente podría ser una estrategia importante para prevenir las enfermedades coronarias en mujeres", han concluido los autores.

El trabajo de estos científicos confirma que uno de los factores importantes que puede provocar una obstrucción de los vasos sanguíneos es el exceso de homocisteína (un aminoácido). La vitamina B6 y el folato pueden reducir los niveles de homocisteína en la sangre, al combinarse con varias enzimas, y por este motivo ofrecen una protección importante contra las enfermedades coronarias.

Hace tres décadas, se descubrieron algunos casos de trombosis arterial en niños, debidos a un desorden metabólico innato que provocaba un nivel excesivo de homocisteína en la sangre. En 1968, los científicos se interesaron particularmente en el caso de un bebé de dos meses que sufrió un ataque virulento de aterosclerosis por este motivo.

Desde entonces, la relación entre el riesgo de enfermedad coronaria y los niveles de este aminoácido han interesado a muchos investigadores, especialmente si se tiene en cuenta el hecho de que ciertos alimentos pueden ayudar a controlar este peligro.

Se ha observado, por ejemplo, la aparición de arteriosclerosis en monos y ratones con una deficiencia de vitamina B6. Además, se ha demostrado que los conejos y los babuinos pueden padecer obstrucciones en sus vasos sanguíneos si se les inyectan dosis altas de hemocisteína. Por lo tanto, al nivel de la experimenta- ción con modelos animales, se ha confirmado en muchas ocasiones la relación que existe entre un exceso de este aminoácido y la aparición de enfermedades coronarias.

En el caso de los seres humanos, ya se habían realizado varios trabajos en el pasado para investigar la posible relación entre la cantidad de vitamina B6 y folato que contiene la dieta de una persona y su vulnerabilidad a los trastornos coronarios.

Recientemente, un estudio que se llevó a cabo en Noruega con 587 pacientes ya sugirió una correlación aparente entre estos alimentos y el riesgo de infarto. El estudio del doctor Rimm y sus colegas, sin embargo, ha reafirmado esta conclusión con mucho más peso científico, al haberse realizado con más de 80.000 mujeres que estuvieron bajo observación durante 14 años.

En un editorial sobre el trabajo de Harvard que también se ha publicado en el Journal of the American Medical Association, el investigador Kilmer S. McCully señala que desde los años 60, la mortalidad por enfermedad cardiovascular ha disminuido considerablemente en Estados Unidos. En su opinión, esto se debe en buena medida a que la dieta se ha enriquecido con una cantidad más alta de folato y vitamina B6, gracias a una mayor abundancia de frutas y verduras durante el invierno.

Según McCully, el nuevo estudio "sugiere que la cantidad de vitamina B6 y folato que se recomienda en estos momentos es demasiado baja para proteger adecuadamente a la población".

Por lo tanto, en su opinión, esta cantidad debería revisarse para ofrecer una protección más eficaz.

Los datos del estudio sugieren que la ingestión diaria de folato debería ser de 400 microgramos, y la de vitamina B6 no debería ser inferior a 3 miligramos, para que se pueda minimizar el riesgo de mortalidad cardiovascular. Según los científicos, "cualquier incremento será positivo", pero para una protección óptima, se necesitarán al menos esas cantidades.

"El estudio sugiere que un fortalecimiento de vitamina B6 y folato en la dieta con suplementos adicionales permitiría un mayor descenso de enfermedad y mortalidad del que ya se ha conseguido en las últimas décadas", opina el doctor McCully.

Otro dato interesante de este trabajo es que el consumo moderado de alcohol ofrecía una protección adicional a las mujeres que ingerían una cantidad alta de folato.

Este fenómeno sugiere que los conocidos efectos beneficiosos de la copa diaria de vino podrían estar relacionados con el consumo de este alimento.


80.000 enfermeras

 

El mundo llegará algún día a estar agradecido al esfuerzo de todo un colectivo sanitario: las enfermeras de EEUU y Canadá. Hace ya 15 años que se está realizando el mayor estudio de cohorte que se ha llevado a cabo hasta la fecha.

Ya está dando sus frutos el seguimiento de todos los detalles de salud de 80.000 mujeres que se comprometieron en su día a formar la mayor base de datos epidemiológica que jamás se hubiera planteado.

La Escuela de Salud Pública de la Universidad de Harvard -que es la responsable del proyecto- está publicando cada vez con más frecuencia en las mejores revistas médicas del mundo, resultados parciales de lo que está pasando con la salud de todas estas féminas. Los datos se refieren unas veces al uso de vitaminas y a la existencia de problemas coronarios y otras, al consumo de grasa y su asociación con el cáncer de mama. A medida que vaya pasando el tiempo, lo que den de sí los datos sanitarios de estas 80.000 personas llegará a ser conocido por casi todo el mundo.


© El Mundo