NEIL BOYCE
New Scientist/El Mundo
Alterar con campos magnéticos los impulsos eléctricos
que emite el cerebro podría algún día ayudar a las
personas a recuperarse de ciertas lesiones, como de ataques de apoplejía
y de los dolores crónicos que se producen tras las amputaciones,
según un estudio publicado en The
Journal of Neuroscience.
Leonardo Cohen, Ulf Ziemann y Brian Corwell, del National
Institute of Neurological Disorders and Stroke, cerca de Washington
DC, se preguntaron si los campos magnéticos podrían inhibir
o potenciar la plasticidad del cerebro. Al aplicar un campo magnético
oscilante al cráneo, una técnica llamada Estimulación
Magnética Transcraneal (TMS), es posible inducir impulsos eléctricos
en la corteza cerebral.
Desde mediados de los años 80, los neurólogos han empleado
la TMS para realizar diagnósticos y estudiar el estado de las fibras
nerviosas, comprobando si aún pueden provocar contracciones musculares.
Algunos investigadores han propuesto la utilización de campos magnéticos
en el tratamiento de trastornos psiquiátricos.
El equipo de Cohen simuló, con la colocación de un torniquete
en el codo de los siete participantes del estudio, la pérdida de
actividad de las fibras nerviosas que ocurre tras una amputación.
Después de colocar electrodos sobre los bíceps de los voluntarios,
para detectar cualquier tipo de contracción muscular, los investigadores
aplicaron electroimanes sobre las zonas motoras del cerebro. "Era
una corriente eléctrica minúscula, aunque con suficiente
potencia para activar cierto número de neuronas", explica Ziemann.
El equipo descubrió que la amputación del antebrazo alteraba
la representación espacial que hacía el cerebro del muñón.
Y los músculos respondieron notablemente cuando los investigadores
colocaron los imanes en el lado del cerebro que controlaba la extremidad
amputada. Pero cuando se colocó el imán en el otro lado,
los bíceps reaccionaron como si no hubiese torniquete. El resultado
sugiere que la estimulación de regiones carentes de plasticidad
puede inhibir la plasticidad de otras zonas motoras.