Tabaco y edad.- Fumar es siempre perjudicial para la salud, pero
un nuevo trabajo acaba de demostrar que para los de edades más avanzadas
es todavía peor. Un estudio presentado en la Academia Americana
de Neurología concluye que los fumadores más mayores tienen
más riesgo de perder la capacidad cognitiva que los no fumadores
de la misma edad. El estudio se llevó a cabo en la Universidad Erasmus,
de Rotterdam, Holanda, con un grupo de voluntarios de más de 65
años. / EL MUNDO
Vacuna en aerosol.- Se está estudiando una vacuna contra
la gripe que se administra en forma de aerosol. En un estudio reciente,
presentado en la reunión anual de la Sociedad para la Investigación
de Pediatría, se demostró que la vacuna experimental era
capaz de estimular el sistema inmune para que produjese anticuerpos contra
el agente infeccioso, sobre todo en la nariz, la primera vía de
entrada del virus de la gripe. / EL MUNDO
Contra el Alzheimer.- Un nuevo trabajo sugiere que hacer ejercicio
regularmente reporta otro insospechado beneficio: protección contra
el Alzheimer. Entre un grupo de 370 personas, estudiado en la Universidad
de Cleveland, aquellos que no tenían Alzheimer en las últimas
etapas de su vida resultaron ser los que habían realizado ejercicio
de forma regular durante toda su vida. Los que nunca realizaron ejercicio
eran 3,5 veces más propensos a sufrir la enfermedad que los que
lo hacían. El Alzheimer es una enfermedad degenerativa del cerebro
que causa pérdida de memoria. / EL MUNDO
Helicobacter e infarto.- La infección por una bacteria
asociada normalmente a las úlceras podría contribuir a desencadenar
la enfermedad cardiaca, según un informe publicado en Circulation.
Unos investigadores italianos aseguran haber encontrado una asociación
entre la Helicobacter pilory y la cardiopatía, y que la enfermedad
depende de la virulencia de la bacteria. En el estudio se encontró
este microorganismo en un 62% de las personas con enfermedad cardiaca y
en un 40% de las que no la sufrían. / EL MUNDO
Psicosis.- Una caída drástica en el coeficiente
de inteligencia de los niños de entre cuatro y siete años
puede ser una señal de psicosis en la edad adulta, según
un estudio que aparece en el último número del American Journal
of Psychiatry. Normalmente, el coeficiente de inteligencia permanece inalterado
durante toda la vida, sin embargo, se cree que los cambios neurológicos
en el cerebro pueden conducir a cambios en el coeficiente. La caída
del coeficiente de inteligencia en etapas tempranas de la vida no se correspondía
con otras alteraciones (no psicóticas) en la edad adulta, como la
depresión, la ansiedad, la manía o el abuso de drogas y alcohol.
/ EL MUNDO