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J. L. DE LA SERNA

Hace sólo unos años nadie pronosticaba que desde España se podría tener acceso, y gratis, a la mayor base de datos médica del mundo. Ahora para consultar algo específico entre los millones de trabajos médicos que se han publicado desde hace 20 años sólo hay que estar conectado a Internet. A precio de llamada local, cualquier persona puede rastrear lo que se haya publicado sobre alopecia areata y albinismo, pongamos como ejemplo. A Medline, la mayor biblioteca médica electrónica que existe en el mundo, propiedad del Gobierno de los EEUU ya se puede acceder desde Internet por muchos sitios. Uno de ellos es a través de esta dirección: http://www.healthgate.com. Y a coste cero se puede allí buscar todo lo relacionado con cualquier tema médico. Este avance es muy significativo para elevar el nivel de cualquier sistema sanitario. Hasta hace algunos meses todo aquel que quisiera profundizar en un tema científico tenía que prepararse a pasar un calvario. Había que estar horas interminables en bibliotecas mal acondicionadas casi siempre; o disponer de los recursos suficientes para poder pagar el costo de un CD-rom en el que cupiera parte de lo que Medline tiene, algo que era una pequeña fortuna para muchos; o pedir por favor a los laboratorios farmacéuticos para que alguien de sus servicios de documentación trabajara en encontrar las peticiones. Ahora todo ha cambiado en pocos meses y tanto Medline como Cancerlit (la otra gran biblioteca electrónica que abarca todo lo que a cáncer se refiere) están accesibles a medio mundo y gratis. Una vez realizada la búsqueda y seleccionados los mejores resúmenes se puede pedir también los artículos completos, aunque eso ya tiene un coste adicional no despreciable. Por el equivalente a 2.500 pesetas por artículo, los responsables del web se comprometen a hacer llegar en menos de una semana y por correo las referencias solicitadas. Hacerlo por fax y en menos tiempo tiene un recargo adicional. El elevado precio está justificado en función del costo del copyrigth de cada artículo que, al parecer, suele ser alto.

Por otra parte, los expertos predicen que 1997 será el año en el que despegue la telemedicina. Al menos eso opinan especialistas de la Universidad de Kansas en EEUU después de evaluar 4.000 consultas sanitarias realizadas con telemedicina. Las consultas se llevaron a cabo en el marco de instituciones para enfermos crónicos. Lo que nadie esperaba es que la tecnología fuera lo que menos preocupó a los pacientes, ya que la mayoría se adaptó muy bien a la teleconsulta. En el seguimiento de cierto tipo de enfermedades la telemedicina tiene, según creen los especialistas, buen futuro. Y cuando las comunicaciones mejoren aún más y las imágenes sean de calidad y en tiempo casi real, buena parte de los cuidados médicos se realizará a través de la telemedicina. Entre otras muchas razones porque de esta manera se gasta mucho menos.