INTERNET
domingo 23 de febrero de 1997

Todos los Dioses en la "Biblia Digital"
Un paseo por la espiritualidad en cientos de Webs

Alberto De Las Fuentes

El dios cristiano, el musulmán, el judío... Todos ellos. Y también, como no, Satán, Belcebú, Lucifer se pasean por la Red. La tecnología ha conseguido reunir en un solo punto a todas las confesiones del mundo, desde las que cuentan con multitud de seguidores hasta las que practican en la soledad unos pocos fieles. Desde las más ancestrales hasta las más nuevas, casi recién creadas. De las que profesan el respeto a la divinidad hasta las que la rechazan de plano. Internet ha servido de catalizador para todas ellas. La Red ha inaugurado un nuevo e inimaginable púlpito desde el que intentar convertir a los no creyentes o, simplemente, dejarse conocer sin ningún tipo de tapujos. La carrera por la espiritualidad ha comenzado en multitud de páginas de Internet y, en ella, los defensores a ultranza y los abanderados del señor de las tinieblas, del maligno, no han querido, por supuesto, quedarse atrás ni un solo bit. Jesucristo, Buda... Toda la espiritualidad está presente en Internet. De hecho, prácticamente todas las religiones del mundo (y numerosas sectas de todo tipo) han visto la conveniencia de utilizar la Red para alcanzar a sus creyentes y dar a conocer su fe y su historia. Se trata de la vieja simbiosis entre lo antiguo y lo nuevo: la religiosidad, uno de los aspectos más ancestrales (y más influyentes) del hombre se ha aliado con la más moderna tecnología para difundir su mensaje. Si es usted creyente o le interesa la historia de las religiones, en este artículo encontrará información abundante. Si no es el caso, le sorprenderá descubrir las increíbles posibilidades de Internet como medio de comunicación. Más de 665.000 documentos en la Red, grandes o pequeños, tienen algo que ver con el fenómeno religioso.

Cristianismo

La confesión mayoritaria en nuestro país, el catolicismo, cuenta con una abundantísima presencia en Internet. En Yahoo! , uno de los muchos buscadores existentes (algo así como las páginas amarillas en la Red), se pueden encontrar más de 6.000 lugares directamente relacionados con la Iglesia católica, desde las páginas oficiales del Vaticano hasta el texto completo de los libros de Santa Teresa de Jesús. No falta de nada. Todo tipo de órdenes religiosas (agustinos, carmelitas, claretianos, franciscanos, dominicos, jesuitas, salesianos y muchos, muchos más) tienen presencia en la Red. Monasterios como el yugoslavo de Medjugorge, editoriales católicas, museos vaticanos y hasta el Opus Dei también están en Internet. La oferta es tal que se puede encontrar desde la cofradía más antigua de la Semana Santa de León hasta cursos por correspondencia sobre el Evangelio e incluso un confesionario virtual, donde los internautas confiesan sus pecados online. Eso sí, se avisa que no tiene valor absolutorio y el comentario que se ofrece se da simplemente como consejo orientativo. Pero los católicos, pese a ser mayoría, no son los únicos cristianos presentes en Internet. Ni mucho menos. Ortodoxos, luteranos, anglicanos, evangelistas, episcopalianos, metodistas o mormones, cuentan con cientos y cientos de páginas en Internet. En algunos casos responden a iniciativas institucionales y en otros muchos son publicaciones creadas y sostenidas por particulares, pero su propósito es siempre el mismo: difundir sus mensajes y sus objetivos a los fieles y al público en general. Y fenómenos como el de los telepredicadores norteamericanos, tan frecuentes en la televisión, también han llegado a Internet, donde "se buscan urgentemente almas para salvar este gran país" y se comercializan todo tipo de objetos religiosos.

Islam.

El Corán es el libro sagrado de todos los musulmanes, que los aspirantes a teólogo deben aprenderse de memoria. Ahora, los textos transmitidos por el profeta Mahoma se pueden encontrar en Internet. Y para quienes tengan curiosidad por comprender el mundo islámico, su historia y su mentalidad, hay un buen número de recursos en la Red donde se explica detalladamente lo que significan todo tipo de términos (como ayatollah o yihad), el papel de la mujer en el Islam, el sentido del matrimonio o la vida y obras de Mahoma, por poner sólo unos ejemplos.También existen textos sobre legislación, arte o arquitectura en el mundo árabe, casi siempre con una fuerte conexión con lo religioso.

Judaísmo.

Para saber sobre el Hanukkah (una de las fiestas más sagradas de la religión judía) o sobre lo que contienen los Rollos del Mar Muerto, o para localizar literatura o cursos virtuales en Torah y Judaísmo, Internet puede ser la herramienta ideal. En estas páginas religiosas también se puede encontrar muchísima información sobre el Holocausto nazi.

Budismo.

¿Quién no ha oído hablar del karma, del zen o de los lamas? El budismo está considerado universalmente, incluso por los creyentes de otras confesiones, como fuente prácticamente inagotable de sabiduría sobre el hombre y el comportamiento ético. Y en Internet hay docenas de lugares para profundizar en las tradiciones y creencias que arrancan con el nacimiento de Siddharta. Y también se pueden encontrar enseñanzas sobre el respeto, la compasión o preguntas y respuestas formuladas al Dalai-Lama sobre problemas que afectan al hombre actual.

Hinduismo.

El hinduismo tiene un Dios supremo (Brahman) y una increíble jerarquía de otros dioses, como Ganesha, Siva, Vishnú o Kali (se dice que existen 333 millones de dioses en el panteón hindú). Cerca de mil millones de personas en todo el mundo participan de esta creencia que aúna monoteísmo y politeísmo y que también se encuentra ya en la Red.

Otras religiones.

Además de los grandes sistemas teológicos, están presentes muchas otras creencias. Hay dioses y mitos de la época prehistórica de los megalitos, de los nativos hawaianos, de los antiguos egipcios, de los griegos, de los romanos o de los indios norteamericanos. Desde el taoísmo (casi tanto una filosofía como una religión) hasta el culto secreto a Mitra, pasando por panteístas o neopaganos, la práctica totalidad de la espiritualidad humana está disponible en las entrañas de Internet, al alcance de cualquier interesado. Hay numerosos grupos de discusión donde creyentes de todo el mundo se ponen en contacto o debaten sobre cuestiones religiosas. E incluso existe publicidad religiosa (previamente pagada, claro), como la que aparece en las páginas del buscador Yahoo! y en la que se puede leer : "La Nueva Iglesia Camina hacia la Luz: Haz click aquí".

Para saber más

¿Vender el alma al diablo?
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