Su Dinero
Actualidad Número 150 / Domingo 6 de diciembre de 1998

Formación

Empleos del Siglo XXI
Las innovaciones tecnológicas y la adopción de nuevos hábitos sociales impulsan el desarrollo de profesiones 'emergentes'


Por Ildefonso García

El trabajo, como la energía, ni se crea ni se destruye, sólo se transforma. Una afirmación que no resulta demasiado aventurada en vista de los rápidos cambios experimentados por nuestra sociedad en los últimos años y que, junto con la aplicación de las nuevas tecnologías, han provocado el afloramiento de profesiones inexploradas hasta ayer mismo.

Son los llamados nuevos perfiles profesionales o profesiones emergentes, unas actividades laborales ligadas estrechamente a sectores como el ocio, el medio ambiente o los servicios sociales, cada vez más presentes en el ámbito de los países de la Unión Europea.

Precisamente la preocupación por el impulso de estos yacimientos laborales, así como la creación de una cobertura formativa adecuada, eran ya algunos de los aspectos destacados en el Libro Blanco sobre el Crecimiento, la Competitividad y el Empleo elaborado por el ex presidente de la Comisión Europea, Jacques Delors. Una inquietud que fue concretada en marzo de 1998 en la Cumbre de Luxemburgo por la ministra francesa de Trabajo, Martine Aubry.

En su informe, Aubry promocionaba la creación de nada menos que 22 nuevos perfiles profesionales.

El guante ha sido recogido en nuestro país por el Ayuntamiento de Barcelona que, recientemente, ha puesto en marcha un plan formativo dirigido a esos sectores emergentes citados por la ministra francesa.

El proyecto, enmarcado dentro del programa Barcelona Activa, incluye actividades distribuidas en cinco ámbitos distintos del sector económico. Cuenta con un total de 380 personas contratadas para poner en marcha programas dirigidos al estímulo de estos yacimientos.

La pregunta es: ¿cuáles son realmente estas nuevas profesiones? Y, aparte de esta iniciativa municipal, ¿cómo puede usted formarse para engrosar en un futuro próximo esta nómina de trabajadores de nuevo cuño?

Servicios sociales.

Por sectores, y tomando como modelo el programa barcelonés, comenzaremos haciendo referencia al entorno de los servicios a las personas, un mercado que se divide a su vez en la atención a colectivos en riesgo de exclusión social, los servicios a domicilio y la atención a la infancia.

De un modo más preciso, en el primer caso hablaríamos de profesiones como las de agente de enlace local ­un intermediario entre los colectivos en situación de exclusión socio-laboral y las distintas entidades de la comunidad­ o de los agentes de inserción de esta misma área.

En cuanto a los servicios a domicilio, destacan empleos como los de agente de atención domiciliaria o de acompañamiento. Y en el sector de atención a la infancia, conviene reseñar la profesión de animador educativo, entre cuyas actividades se incluyen las extraescolares culturales, deportivas o sociales.

La oferta formativa universitaria diseñada para responder a la demanda de estos trabajadores corresponde a la diplomatura de Educación Social, una carrera de reciente creación que se imparte en más de una docena de universidades españolas, entre ellas la Complutense de Madrid, la Autónoma de Barcelona, la de Salamanca y la de Santiago de Compostela.

Aunque en nuestro país suene todavía como algo novedoso, el título de Educador Social cuenta con una larga tradición en Europa. Y es que, hasta su creación en España, aquí sólo existía el de Asistente Social, si bien éste no cubría los aspectos de la intervención educativa. También en cuanto a formación universitaria cabría citar dentro de este sector la diplomatura de Trabajo Social.

Dentro de la Formación Profesional, existe igualmente cumplida respuesta a este yacimiento laboral emergente. Se trata de la familia profesional llamada de Servicios Socioculturales y a la Comunidad, con ciclos de grado superior como los de Animación Sociocultural, Educación Infantil, Interpretación de Lengua de Signos o Integración Social.

Vida sana.

Otro de los nuevos sectores laborales es el que podríamos titular genéricamente como de mejora de la calidad de vida. Aquí nos encontramos con actividades como la revalorización de espacios urbanos o la promoción de nuevos hábitos de consumo, labor desempeñada por los llamados promotores de salud.

En el primer ejemplo, la función de los nuevos profesionales es básicamente la adecuación de los entornos urbanos a las necesidades ciudadanas de ocio, espacios verdes, eliminación de barreras arquitectónicas, etcétera. Los promotores de salud, por su parte, cuentan con la misión de divulgar los hábitos nutritivos e higiénicos más recomendables.

Si acudimos a la tabla de titulaciones de Formación Profesional en busca de una equivalencia de este sector, encontramos rápidamente la familia de Sanidad, también de grado superior y con enseñanzas como las de Salud Ambiental. La Universidad, por su parte, muestra en su menú carreras como las de Ingeniero Técnico en Transportes y Servicios Urbanos o la licenciatura de Ciencia y Tecnología de los Alimentos.

El tercer sector incluido en esta relación sería el de los servicios de medio ambiente. Un ámbito profesional sobre el que escribíamos la semana pasada en estas páginas y que contempla actividades como las de promotor y educador medioambientales o la de agente de conservación forestal.

Ciencias Ambientales.

Para acceder a éstos y otros muchos perfiles profesionales relacionados con el entorno natural ­la figura del consejero medioambiental es cada vez más común en las empresas españolas­, existe una carrera confeccionada específicamente: la licenciatura de Ciencias Ambientales, que comenzó su andadura hace aproximadamente un lustro.

La familia de Actividades Agrarias, dentro del grado medio de Formación Profesional, puede constituir igualmente un magnífico vivero de nuevos profesionales a través de ciclos formativos como el de Trabajos Forestales y de Conservación del Medio Natural.

Otro de los sectores emergentes más relevantes es el relacionado con los servicios culturales y de ocio. En este apartado se abre paso gran cantidad de empleos innovadores, tales como los de agentes de conservación cultural, gestores del patrimonio, diseñador de espacios culturales (se encargan de itinerarios pedagógicos por el campo, por ejemplo) o guías de observación de especies en vías de extinción.

Dentro de este mismo mercado, aunque relacionados con el mundo del deporte, encontramos profesiones como la de animador deportivo, entre cuyas actividades cabría citar la dinamización de centros o la organización de actos deportivos para escolares en horarios no lectivos.

Y para desempeñar estas profesiones, nada mejor que un titulado en Conducción de Actividades Físico-Deportivas en el Medio Natural, cuya formación se incluye dentro de la familia de Actividades Físicas y Deportivas de la Formación Profesional de grado medio. O bien la Animación de Actividades Físicas y Deportivas, en este caso dentro del grado superior.

Dentro del sector turístico, la nueva Formación Profesional ofrece la posibilidad de convertirse en técnico en Información y Comercialización Turísticas, también correspondiente a las familias de ciclo superior.

No se queda atrás en este sentido la enseñanza universitaria, que como cantera de este sector cuenta con titulaciones como las de Técnico de Empresas y Actividades Turísticas o la de Conservación y Restauración de Bienes Culturales. Por supuesto, no nos olvidamos de la licenciatura en Ciencias de la Actividad Física y el Deporte.

La tecnología.

El último de los sectores mencionados en nuestra clasificación es el que responde al fenómeno de las nuevas tecnologías. Y es que hechos recientes como la red informática Internet se han bastado por sí solos para promover la creación de un buen número de perfiles laborales que hace una década hubiéramos atribuido a la imaginación de los autores de Blade Runner.

Así, y dentro del mundo de la telemática y la comunicación, merecen especial mención profesiones como la de diseñador de entornos web. Sí, han leído bien, entornos web.

Con este nombre se designa a los profesionales encargados de estructurar los materiales y elementos de interactividad en las páginas web, esas mismas a las que puede acceder cualquier internauta desde su ordenador en cualquier rincón del planeta. La aplicación de gráficos para la presentación de contenidos en los soportes de edición electrónicos constituye también parte del cometido de estos profesionales.

Otra nuevo trabajo relacionado con la telemática es el de compilador de contenidos multimedia. Su labor, en este caso, es la de integrar los contenidos de cualquier formato en soportes de comunicación electrónicos ­CD rom, revistas electrónicas, etcétera­.

En el entorno de las empresas, la telemática ha traído consigo ocupaciones laborales como las de los infonomistas, los exploradores de datos y los teleanimadores, que no tienen nada que ver ni con José María Iñigo ni con Ana Obregón, sino más bien con la animación y administración en las compañías de debates, foros o presentaciones de productos en diferentes comunidades virtuales. Es decir, presentes a través de los canales informáticos con el fin de promover la cooperación empresarial.

Especialistas.

Dando por sentada la producción de especialistas en estos sectores profesionales por parte de las ingenierías de Informática y Telecomunicaciones, de larga tradición en nuestro panorama formativo, la Formación Profesional recoge también en su programa ciclos de grado superior como Administración de Sistemas Informáticos o Desarrollo de Aplicaciones Informáticas.

Pero al margen de los cinco sectores citados, no cabe duda de que existen otras muchas profesiones y oficios que se han ido desarrollando a lo largo de la última década, cuando no creándose totalmente nuevos.

En esta relación podríamos citar los numerosos empleos generados a través del ámbito del marketing o la comunicación, la imagen y el sonido. En este caso, y además de las archiconocidas licenciaturas que imparte, entre otros centros superiores, la Facultad de Ciencias de la Información de la Universidad Complutense de Madrid, la Formación Profesional ofrece alternativas tan atractivas como las de Producción Audiovisual, de Radio y Espectáculos, o la Realización Audiovisual y de Espectáculos, ambas de grado superior.

Igualmente, el impulso que desde los núcleos urbanos parece reconducirnos a nuestros orígenes rurales y naturales, ha incorporado a este sector al grupo de actividades más productivas en nuestro país. Cada vez son más las iniciativas emprendidas en este sentido, tanto por entidades públicas como por particulares.

Es el caso de las llamadas ecoaldeas, una especie de ciudades verdes de pequeño tamaño y en las que sus habitantes aspiran a alcanzar la autosuficiencia en aspectos como la alimentación, el suministro de agua o la realización de tareas artesanales. En España, el proyecto más avanzado en este sentido es el de la ecoaldea de la localidad madrileña de Valdepiélago.

Oficios tradicionales.

Todo esto hace que oficios tradicionales, que aparecían hasta hace muy poco entre las especies catalogadas en vías de extinción, se hayan revitalizado en buena medida. Para dar cumplida respuesta a estas demandas renovadas la Formación Profesional cuenta entre su oferta con títulos como los de elaboración de productos lácteos, de vinos, aceites o repostería. También existen otros como carpintero o para procesos textiles de tejeduría de punto.

Y, para terminar, la última de las nuevas profesiones es la que viene, lógicamente, a cerrar el círculo. Porque, ¿cómo podríamos haber citado todas estas ocupaciones sin contar con la ayuda de los agentes de dinamización de actividades productivas? ¿Su actividad? Lo han adivinado: identificar y promocionar aquellos sectores económicos emergentes y difundir los nuevos perfiles profesionales y requerimientos de cualificación que comporten.

Para más información:

Dirección General de Formación Profesional y Promoción Educativa. Subdirección General de Promoción y Orientación Profesional.
Tel: 91 701 80 00.


Las Nuevas Profesiones


Unas Cifras a Tener en Cuenta

La iniciativa emprendida por el Ayuntamiento de Barcelona de promover un total de 23 nuevos perfiles profesionales debe acompañarse de la rotundidad de las cifras facilitadas por este municipio en este sentido. Y es que la renovación de la Ciudad Condal en los últimos años ha contribuido a la creación de más de 15.000 nuevos puestos de trabajo relacionados con el turismo, quizá una de las actividades más efervescentes en nuestro país, por no decir la primera.

Respecto a la llamada 'industria verde', ésta da empleo en el área de Barcelona a cerca de 20.000 personas (en toda España esta cifra alcanza los 90.000 puestos de trabajo), mientras que el sector cultural emplea a 22.000 trabajadores.

De este modo, las empresas productoras de tecnología e innovación conviven en la actualidad con las de servicios a las personas y a las propias empresas.

Otro dato muy significativo es la alta proporción de los nuevos empresarios que apuestan por estos sectores emergentes. Así, la compañía municipal Barcelona Activa, dentro de la cual se enmarca el programa de nuevos 'yacimientos laborales', ha cuantificado que hasta el 60% de los nuevos proyectos empresariales desarrollados en su marco guarda relación directa con estas nuevas profesiones.

No obstante, los responsables de esta iniciativa destacan que, en muchos casos, es preciso actuar con decisión e imaginación para favorecer el estímulo de estas actividades, ya que en ocasiones el vínculo entre la oferta y la demanda puede llegar a perderse sin una adecuada canalización de ambas partes. Es decir, ocuparse con mimo de unos recién nacidos que, en este caso, también vienen con un pan bajo el brazo.


| arriba | Actualidad | Números anteriores | Su Dinero |