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Número 122 / Domingo 26 de abril de 1998 |
Moldear Cuerpos 'de Cine'
Desde 2,5 millones para montar un centro de salud y belleza
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Número 122 / Domingo 26 de abril de 1998 |
El cuidado de la imagen personal es uno de los aspectos a los que cada vez dedican más tiempo y dinero hombres y mujeres. Sobre todo con la llegada del buen tiempo, cuando lucir una figura esbelta y una piel tersa se convierte en una obsesión para muchos.
El culto que la sociedad actual rinde al cuerpo ofrece muchas garantías de éxito al amplio abanico de servicios relacionados con el ámbito de la belleza.
Poner en marcha un centro de estética no exige ningún requisito especial, aunque es imprescindible que la persona que vaya a montarlo por su cuenta haya cursado estudios de estética en una academia privada o en Formación Profesional.
Si no cuenta con los conocimientos oportunos, invertir en una franquicia puede ser la alternativa para introducirse en el sector siempre y cuando se tenga capacidad para gestionar y dirigir el negocio. Eso sí, es necesario contratar personal especializado (esteticistas, médicos, expertos en dietética, etcétera) para generar confianza y credibilidad entre los clientes.
Las propuestas que puede encontrar como franquiciado dentro de este sector son diversas. Cada cadena desarrolla una metodología y unos tratamientos estéticos específicos.
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| Enrique González-Herrero, director de franquicias de Vip Clinic España en el centro de Toledo. |
Vip Clinic. Esta compañía de origen italiano, con más de 1.400 establecimientos en todo el mundo, ha iniciado su plan de expansión en España con la apertura de un establecimiento en Toledo y dos en Madrid. Son centros de estética integral computerizada en los que se aplican las últimas tecnologías médico-estéticas en tratamientos de adelgazamiento, reafirmación facial y corporal, lifting, estimulación muscular, drenaje linfático y venoso, y una amplia gama de servicio.
Los franquiciados deben aportar un local de entre 80 y 100 metros cuadrados, dependiendo de los servicios que se ofrezcan, y deberá estar situado en poblaciones con más de 50.000 habitantes. La inversión oscila entre los 11,2 y 15,5 millones, en función del tipo y número de aparatos que incorpore el centro. Este capital incluye el canon de entrada: 1.250.000 pesetas.
Cada mes, el centro asociado debe abonar un royalty de explotación de 60.000 pesetas, y 25.000 pesetas más para publicidad.
Además del franquiciado, los centros Vip-Clinic deben ser atendidos al menos por una directora y dos diplomadas en estética. Para poner en marcha los servicios de Vip-Clinic, el equipo humano encargado del establecimiento tiene que pasar un curso de formación para aprender a aplicar los diversos tratamientos.
El precio de los tratamientos oscila entre las 4.000 y las 6.500 por sesión, con una rentabilidad media del 30%.
Dependiendo de la ciudad en la que se desarrollen los tratamientos, la facturación anual de uno de estos centros puede variar entre los 24 y 44 millones de pesetas. La amortización de la inversión inicial se calcula para el tercer año del inicio de la actividad.
Massana. Con dos establecimientos ubicados en Valladolid y Santander, esta cadena está especializada en tratamientos antiobesidad y celulíticos a través de la estimulación magnética auricular; limpiezas frutales y en la aplicación de técnicas como la electroestimulación para el drenaje linfático o la energía láser.
Para convertirse en franquiciado de Massana, es necesario que el centro cuente con un especialista con conocimientos de estética y salud, una diplomada en Estética para efectuar los tratamientos y una recepcionista.
El capital necesario para abrir un centro oscila entre ocho y 12 millones de pesetas, dependiendo del estado del local y de las obras que se acometan. El enclave ideal para ubicar este tipo de establecimiento es una zona de gran trasiego de público en ciudades con más de 75.000 habitantes. La superficie del local debe rondar los 110 metros cuadrados.
Según la experiencia de la cadena, un centro correctamente ubicado y con un mercado potencial importante puede facturar alrededor de 18 millones de pesetas el primer año de funcionamiento. El margen comercial es del 40% y el plazo de amortización es de tres años.
Actual Sthetic. Esta cadena cuenta con 16 institutos de belleza repartidos por diferentes puntos de la geografía española, y está especializada en los cuidados de higiene de la piel tanto corporal como facial.
Los centros Actual Sthetic están especialmente dirigidos a personas tituladas en Estética que quieran explotar su propio negocio. Si cumple estos requisitos, como franquiciado, tendrá que aportar un local en planta baja, con escaparate a la calle y con una superficie mínima de 60 metros cuadrados. En una localidad con más de 20.000 habitantes.
La inversión necesaria para poner en funcionamiento un instituto oscilará entre los 2,5 y los cinco millones de pesetas, en función de las obras que requiera el local y los aparatos necesarios para prestar sus servicios. El canon de entrada a la cadena es de 825.000 pesetas. Cada mes tendrá que abonar un royalty de explotación de 13.800 pesetas y dedicar a acciones publicitarias alrededor de 25.000 pesetas.
Según estimaciones realizadas y facilitadas por esta compañía franquiciadora, un instituto puede facturar entre 12 y 17 millones al año, con unos beneficios para el franquiciado que oscilarán entre los dos y seis millones.
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