Número 63 / Domingo 2 de Febrero de 1997
Tendrá que facturar 15 millones de pesetas para rentabilizar en un año la inversión inicial
En los últimos años, los fabricantes de caramelos han innovado
tanto la oferta que es difícil decidirse por los caramelos que nos
harán recordar los momentos 'más dulces'. Los podemos encontrar
duros, blandos, masticables, con palo, balsámicos, de goma o dietéticos,
con los sabores más irresistibles y las formas más insospechadas.
El consumo medio de caramelos por español se sitúa en 2,5
kilos al año, muy lejos aún de los 6 y 7 kilos de nuestros
vecinos europeos. En España, los niños siguen siendo los grandes
consumidores, aunque las golosinas poco a poco comienzan a ganar adeptos
entre los mayores.
Montar una tienda especializada en venta de caramelos al peso puede resultar
un negocio agradable y rentable. Si tiene un buen paladar para los dulces
y le gusta el trato directo con el público, no tiene más que
conseguir su carné de manipulador de alimentos y poner manos a la
obra.
Ubicación.
El éxito de una tienda de venta de golosinas al peso depende, en
buena medida, del lugar donde se instale. Deberá buscar un local
en una zona con mucho tránsito para asegurar un mínimo de
ventas. También pueden resultar interesantes puntos como un centro
comercial, una estación de metro o de ferrocarril, donde se da una
gran afluencia de público.
Si se decanta por una estación de metro, debe saber que en las líneas
de la red madrileña puede encontrar locales en alquiler desde las
5.000 pesetas al mes por m2. Tras un estudio detallado de su proyecto, la
gestora le concederá la explotación del espacio solicitado
siempre que en la estación elegida no exista un negocio con la misma
actividad. Además, le exigirán una fianza de dos meses de
alquiler en metálico y un aval bancario de 10 meses. Si prefiere
instalar su establecimiento dentro de la zona comercial de cualquiera de
las estaciones de ferrocarril de largo recorrido, el proceso a seguir es
similar. El precio de alquiler por metro cuadrado varía en función
de la ubicación y las dimensiones del local y de la estación
donde desee establecer su negocio. Se pueden encontrar locales a partir
de 3.000 pesetas el metro. Tendrá que abonar por adelantado dos meses
de fianza en efectivo y presentar un aval bancario por el montante equivalente
a un año de contrato.
Independientemente del enclave que le atraiga más o que mejor se
ajuste a su presupuesto, la superficie mínima para establecer su
negocio será de unos 30 m2, de los que 15 se dedicarán a la
venta al público. La parte restante se reservará para el almacén.
Debe poner especial esmero en la decoración del establecimiento,
de forma que las personas que pasen al lado caigan en la tentación
de comprar. Junto a los elementos decorativos, debe incluir la compra de
estanterías, muebles para poner los recipientes de los caramelos,
los cuencos, las palas para servir, una balanza, una caja registradora y
un mostrador.
A la hora de elegir los elementos decorativos no olvide la normativa técnico-sanitaria
correspondiente. Tenga en cuenta que los focos de iluminación deben
estar protegidos para que la luz no dañe a las golosinas; el suelo
y las paredes sólo pueden recubrirse con materiales lavables; y los
caramelos sólo podrán exponerse en recipientes irrompibles
y cubiertos.
Inversión.
Con una inversión inicial de dos millones de pesetas podrá
decorar, amueblar e instalar los sistemas de aire acondicionado e iluminación
del establecimiento. A los gastos de equipamiento tendrá que añadir
unas 600.000 pesetas para comprar la mercancía inicial. No olvide
que debe ofrecer variedad en productos y golosinas para todos los gustos.
El comercio debe disponerse en forma de autoservicio para que el cliente
perciba que existe un gran surtido y que, además, identifique fácilmente
la golosina que busca. Recuerde que, según la normativa vigente,
al lado de cada cuenco debe exponer un cartel indicando el fabricante y
los ingredientes de los caramelos.
Si encuentra en la venta al peso de golosinas un 'filón de oro' y
consigue unas ventas de unos 15 millones de pesetas, podrá recuperar
el capital invertido en el primer año de funcionamiento. Para conseguirlo,
tendrá que atender usted mismo el negocio.
Antojos.
Ana Villanueva y Armando Belicha fueron los pioneros en la instalación
de tiendas especializadas en la venta al peso de caramelos en España.
Viendo el éxito que este tipo de establecimientos tenía en
otros países europeos, decidieron importar la idea y, a principios
de los 80, inauguraron la primera tienda Antojos en Madrid. Además
de gestionar sus propios establecimientos, Antojos presta asesoramiento
y orientación a todos los interesados en montar una tienda especializada.
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