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| Alfonso Vázquez Fraile, presidente de Concovi, subraya que los socios deben conocer sus derechos y obligaciones |
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| COOPERATIVAS |
| «La base para evitar fraudes es la información» |
| La mayor parte de los cooperativistas optan por este régimen de compra motivados por los precios, a riguroso coste |
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SORAYA DE LAS HERAS
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Alfonso Vázquez Fraile, presidente de Concovi, en su despacho. / BERNABÉ CORDÓN |
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Saber cómo entrar, cómo estar y también cómo salir. Ésta es la frase que Alfonso Vázquez Fraile, presidente de la Confederación de Cooperativas de Viviendas de Madrid, repite hasta la saciedad a todos los que han decido convertirse, al mismo tiempo, en promotores y adjudicatarios de su propia casa o, lo que es lo mismo, incorporarse al mundo del cooperativismo de viviendas.
Una decisión, que suele tomarse por motivos principalmente económicos, ya que «la mayor ventaja de una cooperativa de viviendas es que está obligada, por imposición legal, a adjudicar la vivienda a rigurosos precios de coste», indica Vázquez Fraile.
CÓMO ENTRAR
Lo normal es que la cooperativa esté creada por colectivos homogéneos, pero también puede ocurrir que sea una gestora la que empieza a captar socios. En cualquier caso, es fundamental que el socio, antes de incorporarse a la misma, tome buena nota de una serie de requisitos para evitar disgustos. «Lo primero es comprobar que la cooperativa está legalmente constituida e inscrita en el Registro de Cooperativas de la Comunidad de Madrid y, si es de ámbito nacional, en el Registro de la Dirección General de Fomento de la Economía Social del Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales», subraya Vázquez Fraile.
Este requisito es imprescindible, pero no es el único. «La cooperativa tiene que poseer una cuenta bancaria abierta en la que se van a ingresar las aportaciones de los socios. Esas cantidades deberán, además, estar garantizadas por una compañía de seguros o aval bancario», continúa explicando.
Comprobar la titularidad de los terrenos mediante cualquier documento que lo acredite o acudiendo al registro de la Propiedad correspondiente ayudará al socio a tener más garantías de que la cooperativa no le está engañando.
«Del mismo modo», prosigue Vázquez Fraile, «la cooperativa debe facilitar a los socios los estatutos e información veraz sobre los planes de financiación, los plazos de entrega, los precios de adjudicación, el proyecto técnico...».
CÓMO ESTAR
Cuando el socio ha comprobado que todo está en orden y decide incorporarse a la cooperativa, deberá aportar una pequeña cantidad para el capital social. «De las tres aportaciones que el socio realiza –el capital social; una cuota mensual para los gastos generales mientras la cooperativa compra suelo; y las aportaciones para financiar la compra de la vivienda–, ésta es la menos representativa, ya que sólo sirve para pagar los gastos de constitución de la misma», según señala el presidente de Concovi.
El cooperativista tendrá también que participar en las juntas de emplazamiento. «Muchos compradores son un poco pasotas, pero de ellos depende en gran medida la buena marcha de la cooperativa». Contratar a una gestora, por ejemplo, es una decisión del Consejo Rector tomada en Asamblea General por todos los socios.
En este caso concreto, los socios deberán asegurarse de que se trata de una compañía de reconocida solvencia. «En caso de duda, pueden acudir a la Federación para que nosotros les aseguremos que la compañía funciona correctamente», señala Vázquez Fraile.
CÓMO SALIR
Si el socio se quiere dar de baja, la cooperativa tiene la obligación de devolverle todos los importes que haya desembolsado. La vacante que deja se cubre con un comprador perteneciente a la lista de espera, que aportará las cantidades que haya entregado el socio que se va.
«Muchos de los fraudes que se han producido en el cooperativismo se han dado en el momento de una baja, cuando la cooperativa ha descontado un porcentaje de lo entregado, sin razón alguna».
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| Las claves |
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COMPROBACIÓN.- Acuda al Registro de Cooperativas o al Ministerio de Trabajo para asegurarse de que la cooperativa está legalmente constituida.
TERRENOS.- Su cooperativa debe enseñarle un compromiso de compra. En cualquier caso, no está de más hacer una visita al Registro de la Propiedad para comprobar la titularidad de los terrenos.
SEGURO.- Las cantidades que entregue deberán estar avaladas por una aseguradora o por un aval bancario.
INFORMACIÓN.- La cooperativa debe facilitarle los estatutos e información veraz sobre el proyecto y su financiación.
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