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 DIRECTORIO   18 de Febrero de 2005, número 383 
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Seguridad de 'altura' en los rascacielos más modernos del mundo
MIQUEL GONZÁLEZ | BENIDORM | GUADALUPE GONZÁLEZ | ESPECIAL PARA EL MUNDO / LONDRES | MARÍA RAMÍREZ | ESPECIAL PARA EL MUNDO / NUEVA YORK | DANIEL UTRILLA (CORRESPONSAL / MOSCÚ)
Gran Hotel Bali  

Los edificios más modernos del mundo presentan una cara especialmente vinculada a la seguridad. En algunos casos, como en el de la torre londinense que Norman Foster diseñó para la Swiss Re, ni los propietarios son capaces de aportar información exhaustiva de la misma, precisamente, por «motivos de seguridad». En otros casos, como en el del Gran Hotel Bali, el más alto de Europa, se recuerda que está dotado, a juicio de su propio director, de uno de los sistemas más sofisticados en la lucha contra incendios. En Nueva York, especialmente tras los atentados del 11-S, la edificación de rascacielos ha variado su evidente dependencia del acero para apuntar hacia el hormigón como material de resistencia, como en el caso de las Time Warner. En Moscú, el Triumph Palace, el edificio residencial más alto del continente, se ha construido incidiendo especialmente en los sistemas de detección de incendios.

GRAN H0TEL BALI

Sus 188 metros de altura lo convierten en el hotel más alto de Europa. El Gran Hotel Bali tiene su propio sistema de protección y su protocolo de evacuación. Su director, Enrique Castell, asegura que el gigante benidormí cuenta con un sistema moderno y novedoso que permite desalojar a todos sus clientes en 10 o 12 minutos en el peor de los casos. El edificio tiene 2.500 sensores distribuidos por todas sus plantas y habitaciones, que permiten detectar humos o cualquier conato de incendio al instante. Además, en todas las habitaciones hay instalados un 'springle' o rociadores de agua. «En los pasillos también hay uno cada cuatro metros», señala Castells.

¿Qué sucede en el caso de que algunos de los sensores de la voz de alarma? El director explica que, en ese instante, se pone en marcha el verdadero protocolo de evacuación. Como medida preventiva se cierran las puertas de la escalera de clientes. Y al momento, el jefe de Servicios debe evaluar la situación y valorar si se llama a los bomberos; es decir, si la situación reviste la gravedad necesaria para que tengan que intervenir. «Empiezan a sonar las campanas internas del hotel y se pone en marcha el proceso de evacuación», indica el director. El plan consiste en que el personal de cada planta revisa todas las habitaciones. «Las habitaciones no tienen moqueta; existen los muebles justos y las paredes que dan al exterior son de cemento armado. Lo mismo sucede en los pasillos; no hay sillones, lo que evita todavía más la existencia de elementos de fácil combustión», afirma.

SWISS RE

Uno de los edificios más carismáticos de Londres es el rascacielos de Swiss Re, de 2004. El edificio con forma de pepino que diseñó 'sir' Norman Foster para esta financiera está dotado de tecnología punta contra el fuego.

«Tenemos un sistema de seguridad de lo más avanzado. Las dos historias no son comparables. Ese edificio (la torre Windsor) estaba en fase de renovación», asegura Simona Lauper, del gabinete de comunicación de Swiss Re. «Nuestro sistema antifuego es de lo más moderno, pero no estamos autorizados a dar más datos sobre la seguridad de este rascacielos». De lo que sí hay información es sobre la forma de evacuar el inmueble: el edificio tiene el sistema de salida situado en el centro. Existe un gran corredor interior al que desemboca cada puerta de emergencia de cada planta, por el que se debe salir en caso de catástrofe.

TIME WARNER

Una de las pocas alteraciones notables de Nueva York tras el 11 de septiembre es la manera de construir rascacielos. Hasta los atentados de 2001, para las casas se utilizaba hormigón, pero para los edificios de oficinas, la mayoría altos, se optaba por el acero, más vulnerable al derrumbe. Desde entonces, el hormigón (habitual en España y el resto de Europa) se emplea también como material básico de seguridad para la construcción de rascacielos. Así, las nuevas torres gemelas de Manhattan -la pareja del Time Warner Center, terminada el año pasado y obra de David Childs, el mismo arquitecto que lleva la reconstrucción de la Zona Cero- tienen sus pilares, las escaleras y salidas de incendios en hormigón.

Cada una de las torres, de 80 pisos y 229 metros de altura, situadas en Columbus Circle, frente a Central Park, sigue utilizando el acero, pero sus estructuras básicas están protegidas por el hormigón como nunca antes. Entre las recomendaciones de un panel de emergencia sobre medidas de seguridad, la ciudad «anima al uso de materiales resistentes a los impactos en la construcción de las escaleras y los ascensores». Aun así, ni el hormigón es la única solución; a altas temperaturas, estalla.

En cuanto a la ley para viviendas, en Nueva York es obligatorio que los edificios altos tengan un detector de humo en cada apartamento, aunque su mantenimiento depende de cada residente. Desde el 1 de noviembre pasado cada vecino está obligado a comprar también un detector de monóxido de carbono.

TRIUMPH PALACE

El imponente Triumph Palace, recién levantado en el barrio Sokol (norte), zona residencial de la elite científica y cultural del Moscú soviético, está considerado el edificio de viviendas más alto de Europa (con 264,5 metros de altura). El edificio cuenta con unos sistemas de seguridad antiincendios inimaginables para el bombero soviético.

La constructora 'Don Stroi' ha dotado al Triumph Palace con tecnología punta de origen sueco (Securiton) que permite detectar los incendios en los estadios más tempranos de combustión gracias a un sistema de alarma distribuido por todas las habitaciones, pasillos y 'halls' del edificio.

Cuando la temperatura ambiente supera los 68 grados, se activa automáticamente un sistema de aspersión que actúa sobre la zona incendiada. Además del sistema especial de ventilación -que extrae el humo de la zona afectada por medio de tubos-, el edificio cuenta con una red específica de cañerías de agua para sofocar fuegos manualmente.





 
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