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Febrero de 2002

Motor & Viajes    
       
BOLSA
DE VIAJES

Cuando se pronuncia la palabra ‘Carnaval’ se piensa, en primer lugar, en el de Tenerife. Es, con casi un mes de duración, el más largo de todos los españoles, y su fama sólo es superada por los festejos de Río de Janeiro. De estar prohibido pasó a ser Fiesta de Interés Turístico Internacional

TENERIFE
El exotismo en España
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CÉSAR JUSTEL

 

La fiesta empieza, o mejor dicho, ha empezado ya porque en algunos lugares su inicio es una semana antes o se han celebrado ya con cualquier disculpa. Los carnavales van a llenar estos días buena parte del ocio, la vista, el desahogo o la diversión de muchas personas. Carnavales modernos y carnavales de remoto origen, austeros o esplendorosos, más o menos sensuales, más o menos multitudinarios. Todo indica que el fenómeno va a ser mayor que el pasado año, pero menor que el próximo. Desde que se destapó la caja de la libertad, lo cierto es que el Carnaval no ha dejado de crecer.

Dicen que el de Tenerife es el más largo de todos los españoles y, también, el de mayor colorido. Hubo años, después de la Guerra Civil, en que los carnavales se suspendieron en todo el territorio español y en Tenerife se tuvieron que ocultar bajo la denominación de Fiestas de Invierno, y fue bajo la protección de un obispo que, naturalmente, era de la isla. Luego, a partir de 1977, se abrió la mano y su fama fue aumentando hasta ser declarado, en 1980, Fiesta de Interés Turístico Internacional.

ENTRE REINAS Y DAMAS. Carrozas, bailes, murgas, rondallas, comparsas, escenificaciones, cabalgatas, máscaras, concursos... no es cosa que se prepare en unos días y tampoco son una tontería los gastos, los cuales suelen ser de muchos miles, antes de pesetas, y ahora de euros. Los trajes de las reinas o de las damas suelen costar cantidades que pueden superar en algunos casos los 10.000 euros (1.663.860 pesetas). Pero merece la pena, y muchos opinan que es el dinero mejor empleado.

Una de las fechas claves es el día de la elección de la reina, donde compiten trajes diseñados a base de pedrería y plumaje. Una semana después, tiene lugar la cabalgata anunciadora de los carnavales y los bailes de disfraces. Pero el día más importante siempre ha sido, y será, el martes de Carnaval –este año el 12 de febrero–, cuando el gran desfile –el Coso– recorre incansable la ciudad durante casi cinco horas, con profusión de carrozas, a cual más engalanada, y la intervención de comparsas –a imagen de las brasileñas– y murgas de sentido marcadamente humorístico. La samba y la salsa lo llenan todo.

Algunos remontan el origen del Carnaval tinerfeño al siglo XVIII, cuando tenían lugar batallas a base de huevos rellenos de harina. Luego, en el XIX, surgirían las tapadas, personajes femeninos de la alta sociedad que se mezclaban disfrazadas con el pueblo. En ese mismo siglo, la Iglesia consiguió que se prohibiera que los hombres se disfrazasen de mujer, pero, a mediados del mismo, se aprobaron las ordenanzas por las que el Carnaval de Santa Cruz se podía celebrar sin ninguna traba. La antigua máscara de sábana y careta de cartón ha sido poco a poco sustituida por lujosos trajes, y casi todo el Carnaval es a cara descubierta. En él se ve con claridad también la mezcla de influencias de África y Europa.

UNA FIESTA CON HISTORIA. Fue en 1840 cuando apareció la primera sociedad recreativa –el Casino– y luego El Recreo y La Aurora, que se fusionaron en 1868 con el nombre de Círculo de Amistad. Los bailes que celebraban, junto con los del Teatro Municipal, fueron la máxima expresión del Carnaval durante casi medio siglo. A fines del siglo XIX proliferaron las sociedades recreativas que desempeñaron un papel humanitario durante la Guerra de Cuba, organizando bailes a beneficio de heridos y repatriados.

Con el siglo XX nacen nuevas sociedades recreativas, entre las que destaca el salón Frególi, que fue muy popular. También surgieron las primeras murgas que pertenecían a las clases más modestas. Luego, por los años 20, aparecieron agrupaciones musicales de signo carnavalesco, sobre todo rondallas (agrupación mixta de voces e instrumentos que visten todos igual) y comparsas (grupos musicales sin limitación de número, voces e instrumentos). Luego vendría la prohibición y más tarde su recuperación, y hoy día son tan famosos que hay muchos más espectadores que habitantes.

Durante estos días se celebran bailes en las principales sociedades privadas. Muy recomendables son los quioscos montados por los estudiantes, junto a la plaza de España. El último día, desaparecen plumas y oropeles, los aviones devuelven a los turistas a sus lugares de origen y Santa Cruz recupera su carácter de ciudad tranquila, lo que siempre fue... a la espera del Carnaval del año siguiente.



DATOS

 

COMO LLEGAR
Air Europa (Tfno: 902 401 501), Iberia (Tfno: 902 400 500) y Spanair (Tfno: 902 131 415) ofrecen vuelos diarios a la isla, a partir de 196,06 euros (32.612 ptas.) con Iberia.

ALOJAMIENTO
Es difícil conseguir alojamiento si no se reserva con tiempo. Los mejores son el Hotel Mencey (Tfno: 922 276 700), el Contemporáneo (Tfno: 922 271 571) y el Taburiente (Tfno: 922 276 000). Otras opciones son el Silken Santa Cruz (Tfno: 922 237 723), el Colón Rambla (Tfno: 922 272 550), el Príncipe Paz (Tfno: 922 249 955) y el Atlántico (Tfno: 922 246 375).

DONDE COMER
Algunos restaurantes recomendables son El Coto de Antonio y El Bacalao de la Cazuela (ambos en la calle General Goded); El Guachinche del Mago de Tigaiga (Emilio Calzadilla, 8); Taberna Ramón (frente a la plaza de Toros) y Los Menceyes (Calle Dr. José Naveiras, 38). Otros locales, todos ellos muy céntricos son: Ainara (calle La Luna, 8), Da Gi Gi (Avda. de Anaga, 43), La Cazuela (calle Robayna, 34), Amós (calle Poeta Tomás Morales, 2) y La Posada (calle Méndez Núñez, 61).

MAS INFORMACION
Oficina de Turismo: 922 606 486. Fiestas: 922 606 006.

 

 



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