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 DIRECTORIO   Mayo de 2003, número 20
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EUROPA DE PELÍCULA | IRLANDA
Retorno a las Islas de Aran
Setenta años después de que Robert Flaherty rodase su largometraje ‘Man of Aran’, nada parece haber cambiado en este archipiélago irlandés situado frente al Océano Atlántico
JAVIER MAZORRA
Calles de piedra caliza esperan al visitante que se acerca hasta Inir Mor, la isla más grande y feudo inexpugnable de la lengua y cultura gaélicas. / FOTOS: MANUEL CHARLÓN
   

El camino a Aran sigue siendo casi tan largo como cuando el director de cine americano Robert Flaherty vino por primera vez a estas islas, en noviembre de 1931, atraído por las historias que había escrito el dramaturgo J.M. Synges sobre la vida de sus gentes. Hay que seguir cogiendo un coche o un tren desde Dublín a Galway en la costa oeste, para luego elegir entre un viejo transbordador desde allí mismo o acercarse a otros puertos cercanos como Doolin o Rossaveal, donde salen barcos más rápidos a Inis Mor, la isla principal. De una u otra forma el puerto de llegada sigue siendo Kilronan, la única población de cierta importancia del archipiélago y a donde se dirige la mayoría de los visitantes. Es posiblemente el lugar que más ha cambiado desde entonces, aunque sigue siendo un minúsculo puertecito donde la vida se concentra en los tres o cuatro pubs de la única calle que sale del mismo muelle y termina en Ionad Arann, un centro de interpretación donde se puede ver la película de Flaherty y vislumbrar los misterios de Aran.

Rápidamente se descubre que, a pesar del reducido tamaño de las islas, tanto su riqueza arqueológica como su diversidad de paisajes y costumbres es inmensa. Sólo en la isla principal se concentra el mayor número de fortalezas y edificaciones de la Edad del Hierro de toda esta zona del Atlántico. Por otro lado, a causa del profundo aislamiento de su población, se ha desarrollado durante siglos una cultura única en Irlanda que milagrosamente sigue tan viva como cuando la filmó Flaherty.

Todavía puede ser él el guía perfecto para conocer sus secretos. La casa original donde vivió durante el rodaje y la cabaña de pescadores que mandó construir para ciertas escenas se han convertido en un insólito hotel que venera la memoria de la película. Está situado en un paraje excepcional en medio de Inis Mor, en una colina que domina la playa de arena blanca de Portmurvy. Desde allí se puede ir a pie a las principales fortalezas prehistóricas, siguiendo tortuosas veredas entre jardines de algas y piedras. Al no existir verdaderos terrenos cultivables, los habitantes han creado con arena, algas y algo de tierra, huertos en miniatura rodeados por muros de piedra y que parecen extrañas obras de arte. Compiten en imaginación y creatividad, considerándolos una forma de expresión de sus gentes.



ROCA Y MAR

Dun Aonghasa es quizá la estructura de piedra de origen celta más impresionante de Europa. Está colgada de unos acantilados de vértigo y frente a ellas no hay otra cosa que mar hasta América. Como el resto de las construcciones de esa época —2.000 años antes de Cristo— está rodeada de complejos muros defensivos que aquí se convierten en un inusitado laberinto arquitectónico. Desde allí, siguiendo el camino de los acantilados, van apareciendo círculos de piedras, dólmenes con incisiones geométricas y otros lugares con un fuerte carácter ritualístico.

Inis Mor también está llena de antiguos monasterios. Casi siempre en ruinas que recuerdan que estas islas fueron refugio de los primeros evangelizadores cristianos y más tarde retiro de monjes y anacoretas.

Lo que más interesó a Flaherty, sin embargo, fueron las costumbres de la población. Las mujeres expresaban sus sentimientos a través de canciones pero también con los diseños que introducían en los jerséis que hacían para sus maridos e hijos. Siempre de color blanco, terminaron convirtiéndose en verdaderos objetos de culto. Todavía hoy, cada prenda hecha a mano indica la persona que la ha tejido y las horas que ha tardado en elaborarla, calculándose así el precio.

Los hombres, en cambio, concentraban casi todas sus energías en pescar con los característicos curragh, canoas adaptadas desde hace miles de años al violento mar que rodea las islas Aran. Tienen una armadura de madera recubierta con brea, lo que les da un intenso color negro. Incluso ahora, mantienen la costumbre de llevar una botella de agua bendita sujeta dentro de la proa, y no hay familia que no tenga su propia barca, aunque la pesca haya dejado de ser el principal medio de subsistencia de la población.

Si Inis Mor no ha podido evitar que la afluencia de turistas haya afectado de alguna manera su forma de vida, tanto en Inis Meain como en Inis Oirr, las otras dos islas que completan el archipiélago, todo permanece prácticamente igual que hace cientos de años. Sólo se habla gaélico y la tradición se cultiva con verdadero fervor religioso. Las mujeres imaginan formas y expresan su amor con la lana de las ovejas, mientras que los hombres salen con sus curragh al mar en busca de los rodaballos y las merluzas más sabrosas de Irlanda. A Inis Meain vino Flaherty buscando la casa donde Synge había encontrado la inspiración para escribir sus obras maestras. Más tarde la describiría como «uno de los lugares más primitivos y fascinantes que quedan en Europa».



GUIA

GEOGRAFÍA: Las islas Aran se encuentran al sudoeste de la República de Irlanda, próximas a los condados de Clare y Galway.

CLIMA: Los meses menos lluviosos son mayo, septiembre y octubre.

IDIOMA: Se habla gaélico (primera lengua oficial) e inglés.

INFORMACIÓN: En el teléfono 00 351 917 456 420 o en Oficina de Turismo de Irlanda en Madrid (Tfno: 91 577 46 12 o en la página de Internet: www.turismodeirlanda.com).

CÓMO LLEGAR: Las compañías Iberia y Aer Lingus (Tfno: 91 548 14 34) vuelan de Madrid a Dublín. Hay que coger un tren a Galway y allí hay autobuses al puerto de Rossaveal, donde Island Ferries (www.aranislandferries.com) lleva a las islas.



DÓNDE DORMIR: En Inis Mor, Man of Aran Cottage. Kilmurvey (Tfno: 00 351 996 13 01).



DÓNDE COMER: En Inis Mor, restaurante Aran Fisherman (Tfno: 00351 99 61363).

 
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