¿Una megastar como Nicole Kidman compitiendo con Paz Vega, Victoria Abril y Pilar López de Ayala por el Goya a la mejor actriz patria? No hay derecho, comentan en círculos cinematográficos actrices y gente del espectáculo. Rosana Pastor ya aprovechó la gala de presentación de los Goya, el pasado día 19 de enero, para quejarse.

PAREJO

Por criticar que no quede. Unos pensarán en la corrosiva envidia y otros hasta en la inmolación de una santa -al más puro estilo San Sebastián-. Algunos piropos no tienen precio.

Mirada. Tan perturbadora e impactante como la de la novia de Chuky, el muñeco diabólico.

Piel. Mórbida e inmaculada, absolutamente de ultratumba.

Pelo. Infinita melena pajiza con excesiva predilección por la gomina en la raíz.

Formas. Fina y delicada, escuálida con tendencia a la anorexia.

Sonrisa. Sus labios, dibujados a línea, insinúan algo más que una dulce sonrisa. A nadie se le escapa cierta malicia.

Poses. La misma fórmula de las estrellas de los cincuenta: pie derecho un paso por delante y rodilla ligeramente doblada mientras los flashes disparan con avaricia.