Muy personal


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¿Cuál es su ocupación favorita?

Coser. Toda la vida he cosido, me tranquiliza mucho.

¿Qué talento o habilidad le gustaría tener?

Me encantaría saber pilotar un avión. Debe de ser muy bonito, pero creo que ya es algo tarde para aprender.

¿Qué es lo que menos le gusta de su carácter?

Quizá, mi frecuente tendencia a pensar que voy a acertar con lo que he decidido.

¿Y de los demás?

No me gusta que tengan mal humor. Yo, ese defecto no lo tengo. Me parece una pérdida de tiempo enfadarse.

¿A qué persona viva admira?

A Miguel Delibes. No sólo como escritor, sino también por su honestidad y discreción como ser humano.

¿Su mayor extravagancia?

Pues lo tendrán que decir los demás, yo no me encuentro nada extravagante...

¿Cuál es, según usted, la virtud más sobrevalorada?

Yo pienso que en estos tiempos se da demasiada importancia a todo lo que se consigue a base de dinero. Creo que el culto al dinero que existe hoy es excesivo.

¿Qué es lo que menos le gusta de su aspecto físico?

Las orejas, sin ninguna duda. Las escondo siempre...

¿Qué persona viva le produce desprecio o rechazo?

No desprecio a nadie. Unos me gustan más que otros, pero alimentar el desprecio es un veneno muy malo.

¿Cuál es su actual estado mental?

Pues siento una especie de gusanillo, como si creyera que algo va a pasar. A lo mejor me engaño... Me estimula mucho el otoño.

¿Cuál considera su mayor logro?

Aceptar las cosas como son y como vienen. Es algo difícil de conseguir, y creo que yo lo he logrado.

¿En qué persona o cosa le gustaría reencarnarse?

En un pájaro. Me gustan mucho los pájaros.

¿Cuál es su posesión más preciada?

La pluma de mi padre. Escribo a veces con ella, y la guardo como un tesoro. También tengo un huevo de madera, de esos que ya no se tienen en los costureros, que era de mi madre y de mi abuela.

¿Por qué se dejaría matar?

Por nada. Procuraría escapar siempre...

La cualidad que más admira en un hombre es...

La lealtad.

La cualidad que más admira en una mujer es...

La lealtad.

¿Cómo le gustaría morir?

La verdad es que no me gustaría nada morir, ni tampoco me gusta pensar en ello.

¿Cuál es su lema de vida?

Cosa por cosa. Quiero decir que cada una tiene su tiempo y no deben hacerse a mogollón, porque salen mal.

¿Cuál considera usted la mayor de las miserias?

La mayor miseria es vivir para los objetos, en vez de que los objetos estén a tu servicio.

Si le quedaran tres días de vida, ¿qué haría?

Dormir los tres para olvidarlo.

Una manía.

Tengo muchas. Por ejemplo, me pone muy nerviosa que me ordenen mi desorden. Porque yo, dentro de mi desorden, tengo un orden.

¿Qué es para usted la buena educación?

Escuchar a los demás.

Diga un gran avance del siglo XX.

Aunque no es propiamente del siglo XX, me parece un gran avance volar. Ahora nos resulta normal ir de punta a punta del mundo en poco tiempo, pero a mí me parece que es algo maravilloso.

Cuando está triste, ¿qué hace para animarse?

No hay nada que hacer. Aguantar. Acordarse de que de otras peores has salido, pero nada más. Cualquier cosa que intentes es inútil, es como tratar de curar el cáncer con una aspirina.

¿Qué última moda le saca de quicio?

La hipertrofia de los teléfonos móviles.






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